El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció hoy que el auxilio de emergencia para personas que han visto reducidos sus ingresos en el marco de la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19) será prorrogado por otras cuatro cuotas de 300 reales (unos 56 dólares) hasta fin de año.

La medida fue confirmada en una declaración a la prensa tras una reunión del presidente con los ministros y parlamentarios de la base del gobierno en el Palacio da Alvorada, la residencia oficial, para alinear las próximas acciones en el área económica.

La ayuda está destinada a los trabajadores del sector informal, los microempresarios individuales, los trabajadores por cuenta propia y los desempleados, a fin de proporcionar protección social de emergencia durante la crisis causada por la pandemia.

El beneficio comenzó a pagarse en abril, e inicialmente fueron establecidas tres cuotas de 600 reales (unos 112 dólares), tras lo cual fue extendido en junio por otros dos meses, hasta fin de agosto, con el mismo valor.

Durante la reunión, también se acordó que el jueves el gobierno enviará un proyecto de reforma administrativa al Congreso, que se basará en criterios de meritocracia, aunque no alcanzará a los actuales empleados públicos, sino sólo a los futuros concurrentes.

Según el senador Fernando Bezerra Coelho, líder del gobierno en el Senado, Bolsonaro ya ha comunicado las decisiones a los presidentes de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, y del Senado, Davi Alcolumbre.

Dijo, además, que el proyecto de un nuevo programa de distribución de renta mínima del gobierno, llamado «Renda Brasil», también será puesto a discusión próximamente.

Según los últimos datos divulgados el lunes por el gobierno, un total de 67,2 millones de personas recibieron la ayuda de emergencia en el país.

Alrededor de 4,4 millones de hogares brasileños sobrevivieron en julio sólo con los ingresos de la ayuda de emergencia dada por el gobierno federal para hacer frente a los efectos económicos de la COVID-19.