Advierten que rusofobia crece en América Latina impulsada por Occidente, advierte analista
13 de abril de 2022
Fuente:
https://mundo.sputniknews.com/
Si bien el sentimiento antirruso no es nuevo, Occidente utiliza el conflicto entre Rusia y Ucrania para revivir prejuicios y temores hacia la cultura rusa. La experta Talya Iscan dijo a Sputnik que se trata de un fenómeno "muy peligroso" que no se dio contra EEUU al invadir Irak o Afganistán.
"Estamos ante un sentimiento rusofóbico a nivel global", aseveró la especialista y docente de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), señalando que es producto de campañas de Occidente que incentivan este rechazo y odio social. La situación en Ucrania traspasó los límites territoriales y repercutió en el mundo, no solo a través de sanciones comerciales y bloqueos a Rusia, sino a través de un rechazo social que cobra fuerza. Universidades de EEUU y Europa han retirado convenios con compañías rusas y frenado colaboraciones científicas e incluso algunas han realizado modificaciones en sus programas para rechazar los aportes de intelectuales rusos.
A lo largo de la historia ha habido muchas atrocidades, crímenes de guerra y no se ha producido el fuerte rechazo social que sí están padeciendo los rusos. "En ningún momento, cuando EEUU invadió Irak, saltando el Consejo de Seguridad, o cuando sucedió la guerra en Afganistán, se pusieron sanciones sociales", dijo Iscan, que agregó que este sentimiento "se generó desde un discurso de discriminación desde las potencias occidentales".
La especialista explicó que "este fenómeno no es nuevo sino que surgió en tiempos de la Guerra Fría, relacionada al miedo de la expansión del comunismo".
El conflicto en Ucrania revivió ese sentimiento antirruso "que amplía un espectro de sentimientos negativos vinculados con prejuicios y temores hacia la cultura rusa, hacia el idioma ruso, incluso hacia la historia rusa".
La rusofobia en América Latina
El sentimiento antirruso ha llegado incluso a la región latinoamericana que no pudo librarse de atravesar episodios de similares características que EEUU o Europa.
Recientemente Argentina fue testigo de diversos actos de vandalismo que dejaron al descubierto el desprecio hacia los rusos.
El 2 de abril fue atacada la Iglesia Ortodoxa Rusa del Patriarcado de Moscú—la catedral más importante de Sudamérica—, ubicada en el barrio Palermo de la ciudad de Buenos Aires. Las inscripciones acusaban al mandatario ruso Vladímir Putin de "genocida".
La embajada rusa en Argentina calificó el ataque de un insulto a Rusia y su liderazgo e instó a las autoridades argentinas a sancionar a los responsables.
A su vez, también la plaza de la Federación de Rusia en el barrio Belgrano fue vandalizada: su nombre fue tachado y los colectivos de inmigrantes rusos en Argentina denuncian casos de discriminación.Anteriormente, en marzo, se dió a conocer que la Conferencia de Directores de Ferias Internacionales del Libro, que desarrollan ferias a gran escala de promoción de la lectura a nivel internacional, decidió suspender sus vínculos con editores rusos debido al conflicto en Europa del Este.
Las ferias internacionales de Bogotá (Colombia), Guadalajara (México) y Sao Paulo (Brasil) fueron las tres ediciones latinoamericanas que se plegaron a la medida.
También la Universidad de Guanajuato en México, similar a lo sucedido en centros educativos europeos, planteó excluir creaciones de compositores rusos del repertorio de su Orquesta Sinfónica, algo que provocó el rechazo de músicos y finalmente se revirtió.
Para la experta, la politización del escenario de la guerra y su traslado al contexto social generará a su vez otras consecuencias, como la afectación de las políticas exteriores y los procesos migratorios. Según Iscan, América Latina será la región menos afectada por este fenómeno, aunque esto no signifique que no habrá episodios rusofóbicos.
"Politizar lo social, no solamente es un peligro para los rusos, sino para todo el mundo", sostuvo e insistió en que "estamos rechazando una herencia mundial" que no se puede desconocer.