Latinoamérica pierde inversión extranjera

21 de noviembre de 2017
Fuente: http://murciaeconomia.com/

Latinoamérica pierde inversión extranjera

 

 

La inversión extranjera directa perdió fuerza en Latinoamérica durante el 2016 en comparación con años anteriores, comportamiento que se espera que se prolongue a lo largo de este año.


No obstante, también hay motivos para el optimismo. A tenor del informe 'La inversión extranjera directa en América Latina y el Caribe 2017', presentado el pasado agosto por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), América Latina recibió el 10% de la inversión extranjera directa global en 2016.

Pese a ello, los flujos de inversión extranjera representan el 3,6% del producto interno bruto (PIB) de la región, cuando el promedio global es de 2,5%. Esto evidencia la relevancia de estas entradas para las economías latinoamericanas, según dicho organismo.

En 2015 los flujos mundiales de inversión extranjera directa aumentaron un 36%, empujados por una ola de fusiones y adquisiciones, sobre todo transfronterizas, concentrada en los países más desarrollados, especialmente en Estados Unidos.

En cambio, la inversión extranjera solo creció en nueve países de la región entre 2015 y 2016, siendo los más destacables Bahamas, Panamá, Colombia, República Dominicana, Brasil y Paraguay. Dentro de este grupo, Brasil aumentó un 5,7% sus ingresos de inversión extranjera directa en 2016 y se mantuvo como el principal país receptor en la región, con 78.929 millones de dólares. Esto supone el 47% del total.

Respecto a la proveniencia de las inversiones, hay grandes diferencias en función de los países receptores.
Según la CEPAL, los países de América del Sur tienen una mayor presencia de inversores europeos, mientras que en México Centroamérica y el Caribe prevalecen las empresas de Estados Unidos.

Por otra parte, las economías emergentes tuvieron una participación de un 37% en la inversión extranjera directa global en 2016, motivado por la reconducción de las inversiones trasnacionales hacia mercados que ofrecen sofisticación tecnológica y expansión de la economía digital, concentradas en países más avanzados.

Por sectores, la inversión extranjera directa dirigida a Recursos Naturales cayó del 18% en 2010-2015 al 13% en 2016, en correspondencia con la caída de los precios de las materias primas.

En cambio, las Manufacturas y los Servicios aumentaron hasta el 40% y el 47%, respectivamente. Por su parte, las nuevas inversiones se concentraron en Energías Renovables, Telecomunicaciones e Industria Automotriz.

CEPAL proyectó para 2017 una nueva caída de los ingresos de inversión extranjera directa en la región de en torno al 5%.

De esta forma, el crecimiento en América Latina avanzaría al 0,8% en 2017 y al 1,7% en 2018. Esta recuperación, tras la contracción del -1,2% en 2016, estará apoyada en la salida de la recesión de Brasil y Argentina, pues en la mayoría del resto de países se producirá una desaceleración de la actividad en este ejercicio respecto al pasado, arrastrada por shocks externos y la falta de demanda interna.

Así, y según dicho organismo, los países de la región que más crecerán en términos de PIB en 2017 serán Panamá, que lo hará un 5,6%, seguido de República Dominicana, con un 5,3%. Siguiéndoles, se espera un crecimiento del 4,7% para Nicaragua y del 4,1% para Costa Rica.