La firma de inversiones estima que de acuerdo a los cálculos con base en las técnicas econométricas bayesianas, colocan la inflación anual en 404%.
"Venezuela no evidenció un proceso hiperinflacionario durante el 2016, y sitúan el índice inflacionario en 404%" añadió Torino Capital.
Desestiman las proyecciones de inflación por encima de 600%. Para ellos, no sólo son incompatibles con la mayoría de los ejercicios empíricos que sostienen sus bases en datos replicadas en una cesta completa de bienes y servicios aproximada a un índice de precios, también implicarían una contracción en algunos agregados macroeconómicos como: el gasto y el crecimiento monetario.
No obstante, Torino Capital argumenta que la premisa de un país fuera del estado de hiperinflación durante el año pasado “es una cuestión distinta a si termina en esta”.
“Cualquiera que sea el estimado que escojamos, está claro que la inflación se aceleró significativamente el año pasado a partir de la tasa de 181% en 2015. En nuestro pronóstico, que la inflación comience a desacelerarse depende de manera crucial del tamaño del déficit gubernamental que deberá monetizarse”, determinan los especialistas.
Desde su perspectiva, consideran que dado el gran descenso en el gasto real que se ha observado hasta la fecha, una disminución en la velocidad en que se crea dinero y se desaceleren los precios.
“En un escenario alternativo, los precios podrían ciertamente seguir subiendo rápidamente si los intentos del Gobierno por elevar el gasto o los ingresos declinan más rápidamente” destaca.
“Sea que Venezuela continúe flanqueando en un territorio de alta inflación o transite hacia la hiperinflación será fundamental para determinar la capacidad del país para continuar cumpliendo con su deuda”, señala la firma.