Costa Rica da giro a nexo comercial chino
07 de septiembre de 2015
Fuente:
ElFinancieroCR.com, Costa Rica
San José, 7 de septiembre de 2015.- El vínculo comercial entre Costa Rica y China está inmerso en una etapa de ajustes. Luego de que ambos países establecieran relaciones diplomáticas en el 2007 y cuatro años más tarde firmaran el Tratado de Libre Comercio, la relación con el gigante asiático aún representa un desafío para Costa Rica.
Con los niveles de exportación golpeados por el cese de operaciones de manufactura de Intel, el país busca una nueva estrategia para colocar productos en el enorme mercado asiático, al tiempo que se pone al día con la aprobación de protocolos sanitarios.
Actualmente, los exportadores costarricenses mantienen una conexión directa con los compradores en China, sin recurrir a intermediarios.
Este esquema le ha impedido al país contar con un centro de distribución de productos en China. Algo necesario debido a los grandes volúmenes de mercancía que solicita ese mercado según Alexánder Mora, ministro de Comercio Exterior (Comex).
“Estamos valorando implementar centros de acopio y distribución en China desde donde se pueda despachar producto e independicemos el aprovechamiento de las oportunidades comerciales con el flujo mismo del comercio. A veces la escala no nos permite responder”, dijo Mora.
A esta complejidad, se suma la necesidad que tiene el país de acelerar la aprobación de los protocolos sanitarios. El jerarca estima que la lentitud al avalar estos procesos ha provocado el retraso en concretar más ventas con el gigante asiático.
Pendientes
Los protocolos contienen los requisitos de sanidad exigidos por las autoridades del país asiático. Cada sector productivo debe cumplirlos y China los tiene como indispensables para abrir el mercado. Ya están en vigencia los permisos para exportar a ese destino carne de res, lácteos, langostinos y banano.
Los productores de carne de cerdo tramitan desde hace tres años uno de estos requisitos. Renato Alvarado, director de la Cámara Nacional de Porcicultores, afirma que la aprobación de los permisos está varada porque China solicitó que se retire del mercado un producto que se usa para el estímulo del crecimiento de los animales.
“Nosotros creíamos que no iban a haber tantas dificultades”, comentó Alvarado.
Comex espera para el 29 de setiembre la visita al país del ministro chino a cargo de los trámites de protocolos sanitarios, quien vendrá con el propósito de firmar varios de los permisos.
Otro de los asuntos que Costa Rica tiene pendiente en el intercambio comercial con China es la aprobación del Acuerdo para la Promoción y Protección de las Inversiones, el cual pretende crear un marco jurídico aplicable a los negocios entre ambos países.
Este acuerdo se firmó en octubre del 2007, un año después comenzó el trámite legislativo y llegó al plenario para su primer debate en enero del 2011; sin embargo, aún no se ha concretado.
Mora afirma que el atraso en la aprobación de ese proyecto, “nos ha restado de manera importante interés de parte de ellos”.
Nichos y valor agregado
El cierre de la fábrica de chips de Intel a finales del 2014 es otro factor que impulsó a Costa Rica a reinventar su plan de intercambio comercial con China.
Hasta 2014, la compañía era el principal exportador al gigante asiático con un 70% de la colocación de productos correspondiente a circuitos integrados y microestructuras electrónicas.
Ahora Costa Rica está percibiendo el impacto en la caída de las exportaciones a China y por ello, las autoridades comerciales apuestan por diversificar la oferta y apuntar a nichos específicos.
“El posicionamiento de Costa Rica en China no debe ser ni por volumen ni por precio, debe ser por valor agregado”. Así define Pedro Beirute, gerente general de la Promotora del Comercio Exterior (Procomer), la táctica que traza el país para abrirse más espacio en el mercado chino.
Esto coincide con el punto de vista de Jorge Sequeira, director general de la Coalición Costarricense de Iniciativas de Desarrollo (Cinde), quien también cree que el país debe apostar por la diversificación, ya que no depende de sola una industria para impulsar sus exportaciones.
“No dependemos ni de una industria ni de una empresa en específico”, manifestó Sequeira.
Por su parte, Beirute explicó que la estrategia de Procomer está enfocada en tres regiones: Pekín, Shangái y Shenyang.
Procomer abrió en mayo su oficina de promoción comercial en Shangái, pues es la capital financiera de China. Además, allí está el principal puerto del país.