Secretaria General Iberoamericana afirma que Latinoamérica sufre una desaceleración, pero no una crisis generalizada
12 de junio de 2015
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Publicado por la Agencia EFE, vía Yahoo! Noticias
Bruselas, 12 de junio de 2015.- La secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, expresó su preocupación por la desaceleración económica en América Latina, pero subrayó que no se trata de una "crisis generalizada" y que los países de la región cuentan con instrumentos para hacer frente a la situación.
Grynspan, en una entrevista a Efe, hizo referencia a las últimas previsiones del Banco Mundial que auguran que la economía de América Latina rozará el crecimiento nulo este año, con apenas una expansión del 0,4 %, frente al 1,7 % pronosticado hace seis meses.
"No estamos contentos con las tasas de crecimiento que estamos teniendo en la región. Por supuesto que nos preocupa la desaceleración, pero América Latina no es la región de los 80. Tenemos muchos más instrumentos, muchas más fortalezas y una posición de inicio mucho más fuerte para enfrentar esta desaceleración", dijo Grynspan.
"Yo no creo que se pueda hablar de crisis generalizada en América Latina porque eso no es lo que está pasando", subrayó.
La secretaria general iberoamericana hizo hincapié en las diferencias entre la situación actual de Latinoamérica y la que se vivió en los años 80 e insistió en que ya "no es la región sobreendeudadada, sin instrumentos flexibles de tipo de cambio con macroeconomías y déficits excesivamente elevados".
La ralentización en la región, explicó, se debe a la situación de Venezuela, Argentina y Brasil, "que sí van a tener tasas de crecimiento negativas".
"Son economías que tienen un peso muy grande sobre toda la región y, por lo tanto, hacen que la tasa de crecimiento este año vaya a ser menor al 1 % en América Latina y por primera vez menor a la de Europa en los últimos diez años, desde la crisis financiera", añadió Grynspan.
Sin embargo, agregó, "México va a crecer alrededor del 2 %, Centroamérica está creciendo en promedio como el 4 % y Ecuador, Perú, Bolivia, Colombia, Uruguay y Paraguay, todos tienen tasas de crecimiento positivas y andarán alrededor del 2 o 3%. Lo que pasa es que estas economías grandes tienen un peso relativo grande sobre la región y el promedio no es bueno".
Respecto a la cumbre entre la Unión Europea y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC) celebrada el miércoles y el jueves en Bruselas, la secretaria general iberoamericana consideró "muy positivo" que la declaración común aprobada incluya una referencia a la situación a Venezuela y a las relaciones entre la UE y Cuba.
"La verdad es que son temas difíciles porque hay situaciones muy diversas, no solo en América Latina, también en Europa. Me parece muy positivo que se haya llegado a un consenso", declaró a Efe.
También resaltó los avances logrados en tres ámbitos en la reunión, empezando por el anuncio de "la facilidad de cooperación sur-sur y cooperación triangular".
Asimismo, valoró los objetivos acordados en el ámbito de la educación superior y mencionados tanto en la Declaración de Bruselas como en el plan de acción común que, a su juicio, ayudarán a fortalecer los vínculos en materia de estudios y movilidad.
Además, hizo hincapié en que se vaya a dar "un énfasis que no tenía antes" a la fundación UE CELAC.
Sobre el acuerdo UE-MERCOSUR, en relación al cual los dos bloques se comprometieron a intercambiar sus primeras ofertas de acceso a los mercados, Grynspan opinó que "hay señales muy positivas de que hay interés de retomarlo".
Por otro lado, consideró que tanto la UE como los países latinoamericanos tienen mucho que aprender los unos de los otros.
"Nosotros tenemos mucho que aprender de Europa. Hemos aprendido mucho en el pasado del sistema de bienestar, de su capacidad redistributiva a través de sus sistemas tributarios, son cosas que todavía América Latina tiene que aprender", indicó.
Pero Latinoamérica, señaló, "también tiene un acervo de conocimientos y experiencias que creemos que para Europa pueden ser relevantes".
Se refirió a la existencia de tres "agendas comunes" entre ambos bloques, la primera de ellas en términos de empleo y productividad y para "incorporar mucho más a las pymes para un desarrollo más inclusivo".
Las otras agendas comunes son "el desarrollo sostenible", la lucha contra el cambio climático y la energía, ámbitos en los que "tenemos una tarea común que llevar adelante en los foros globales", así como las infraestructuras" dado que "hay un interés en Europa en invertir y ayudar a América Latina y América Latina tiene un déficit de infraestructuras que debemos superar", puntualizó.