Unión Europea y Cuba logran avances en su diálogo político

Bruselas, 23 de abril de 2015.- La Unión Europea y Cuba dieron ayer miércoles un nuevo paso en sus discusiones sobre derechos humanos y anunciaron la creación de un diálogo estructurado para abordar ese tema, el mismo día en que certificaron la reanudación de su diálogo de alto nivel.

"Hoy hemos retomado formalmente nuestro diálogo político", declaró la jefa de la diplomacia comunitaria, Federica Mogherini, en una rueda de prensa junto al canciller cubano, Bruno Rodríguez, de visita en Bruselas, citó Efe.

La alta representante comunitaria destacó que las partes no celebraban una reunión de diálogo político de alto nivel desde 2011, y afirmó que "hay muchas áreas en las que la UE y Cuba pueden tener una relación fructífera".

En paralelo, también indicó que esperan iniciar en junio en Bruselas un diálogo estructurado sobre derechos humanos, un formato de conversaciones que la UE mantiene con muchos países, y apuntó que pedirá al representante especial comunitario para los Derechos Humanos, Stavros Lambrinidis, que siga el proceso.

Por su parte, Rodríguez aseguró que "los anuncios que acaban de realizarse confirman los progresos alcanzados" en las relaciones con la organización.

"La UE y Cuba hemos tenido extensos intercambios sobre derechos humanos por muchos años", dijo, y agregó que el diálogo que van a emprender será "una contribución a la cooperación internacional en esta fundamental materia".

"Estamos dispuestos a una cooperación más amplia en la garantía del ejercicio de todos los derechos humanos, incluidos los civiles y políticos y también los económicos, sociales y culturales para todos los seres humanos del planeta", afirmó el canciller Rodríguez. Los derechos humanos es uno de los aspectos que se abordan en la negociación de un acuerdo de diálogo político y cooperación entre la UE y Cuba -que podría convertirse en el primer pacto bilateral entre las partes-.

Mogherini se mostró confiada en que la próxima ronda de negociaciones tenga lugar en junio y que puedan concluir el proceso a finales de año.

"Existen áreas también de profundas discrepancias entre la UE y Cuba", advirtió en todo caso Rodríguez.

El canciller apuntó que la "posición común", la política restrictiva unilateral que mantienen los Veintiocho hacia Cuba y que supedita sus relaciones al avance de los derechos humanos en la isla, "ni siquiera se mencionó" cuando la Unión invitó a La Habana a negociar dicho acuerdo.

El bloque comunitario espera que el acuerdo en ciernes pueda sustituir a la "posición común", rechazada de pleno por La Habana, pero que sólo puede retirarse con el voto unánime de los Veintiocho.

Mogherini hizo hincapié en que la relación con Cuba es "fuerte" y que la UE espera "acompañar" el proceso de cambios que se está produciendo en América Latina.

El papa Francisco se convertirá en el segundo pontífice en visitar Cuba en este siglo, y el tercero en la historia reciente, luego de anunciarse que estará en la isla en septiembre, con un viaje que estará cargado de gran simbolismo político.

"El Santo Padre aceptó la invitación de las autoridades y de los obispos de Cuba... y estará en la isla antes de arribar a Estados Unidos para el viaje" del 22 al 27 de septiembre, anunció el portavoz de la Santa Sede, Federico Lombardi.

Como en el pasado, el Vaticano jugó un papel clave en el acercamiento de la Cuba comunista hacia el exterior, pero esta vez fue el propio Francisco quien ayudó al deshielo entre Cuba y EEUU, al fungir como mediador entre los dos gobiernos para restablecer relaciones.

Jorge Mario Bergoglio se convertirá en el tercer pontífice que visita Cuba en 17 años, después de Benedicto XVI, en marzo de 2012, y Juan Pablo II, en enero de 1998. La Iglesia católica ha tenido un rol clave en lo que se refiere a la mediación de asuntos espinosos en la isla como los derechos humanos.

Cuando Juan Pablo II estuvo en Cuba, el entonces presidente Fidel Castro permitió que se celebrara la navidad el 25 de diciembre, y con Benedicto XVI, su hermano Raúl, actual jefe de Estado, autorizó celebrar la Semana Santa. La incógnita ahora es qué señal de apertura aceptará el gobernante en un país donde ser opositor al régimen puede costar la vida.

En su visita a EEUU, Francisco será el primer papa en hablar ante el Congreso. Allí el tema del embargo a la isla, que ha condenado siempre, puede relucir en su discurso, y será escuchado por una amplia mayoría republicana que se muestra contraria a levantarlo.