Menor crecimiento económico y mayores precios alimentarios podrían afectar el acceso a los alimentos de los habitantes de América Latina y el Caribe

21 de mayo de 2014
Fuente: Tomado de la Web de la FAO-ALC
Santiago, 21 de mayo de 2014.- Un crecimiento económico más bajo que el pronosticado para el 2014 y precios alimentarios más altos a nivel doméstico durante el primer trimestre podrían afectar el acceso a los alimentos de los habitantes de América Latina y el Caribe, señaló la FAO.

Según el Boletín Trimestral de Seguridad Alimentaria, los países de América Latina y el Caribe -y en particular Sudamérica- enfrentan una menor expectativa de crecimiento para el 2014, producto de una reducción en los precios internacionales de sus productos de exportación.

Adicionalmente, se espera un incremento en los niveles de desempleo de varios de los países de América del Sur durante 2014, producto del menor ritmo de expansión de la economía.

Lo anterior, sumado a mayores precios alimentarios al interior de los países, podría tener un impacto negativo sobre el acceso a los alimentos de parte de los habitantes de la región, una de las cuatro dimensiones de la seguridad alimentaria.

“Si bien aún no se observan impactos claros sobre la seguridad alimentaria regional, es importante que los gobiernos mantengan una mirada atenta sobre estos indicadores, a fin de que no se pongan en riesgo los avances realizados en la lucha contra el hambre”, explicó Raúl Benítez, Representante Regional de la FAO.

Utilización de alimentos podría verse afectada

La utilización de los alimentos podría verse amenazada por cambios en los hábitos alimenticios de las poblaciones más vulnerables de la región, como consecuencia del alza en los precios de los alimentos, que los puede llevar a reemplazar alimentos sanos y nutritivos por otros menos saludables pero más baratos.

Para prevenir esta situación los gobiernos de la región han continuado impulsando una serie de medidas que permiten garantizar la adecuada alimentación de sus poblaciones. Guatemala, por ejemplo, comenzó a implementar el programa “Mi Comidita”, con el apoyo del gobierno de Canadá y el Programa Mundial de Alimentos, y entrega complementos nutricionales para erradicar la desnutrición en niños menores de dos años en el marco del Pacto nacional “Hambre Cero”.

Disponibilidad y estabilidad de alimentos

Según el Boletín Trimestral, la disponibilidad de alimentos, por su parte, se encuentra asegurada en la región, gracias a buenos pronósticos de producción y una recuperación de las cosechas a lo largo de toda la región.

Durante el trimestre no se observaron situaciones climáticas que pusieran en riesgo la dimensión de estabilidad de la seguridad alimentaria en la región, pero si existe una preocupación en torno a la inflación alimentaria y general de la región, que he demostrado una tendencia al alza durante el primer trimestre.