La UE destinará 2.500 millones de euros de ayuda al desarrollo a Latinoamérica entre 2014 y 2020

Bruselas, 25 de marzo.- La Unión Europea destinará 2.500 millones de euros de ayuda al desarrollo a Latinoamérica entre 2014 y 2020 en concepto de ayuda bilateral a países y programas de ayuda regionales, según ha avanzado la Comisión Europea.

Cuba, Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela podrán acogerse a los fondos regionales, según ha informado el Ejecutivo comunitario en un comunicado.

En el caso de la ayuda bilateral, la UE ya ha avanzado que mantendrán una ayuda importante para los países que se enfrentan a mayores desafíos como son Bolivia, El Salvador, Guatemala, Honduras, Paraguay y Nicaragua, aunque Colombia, Ecuador y Perú también seguirán beneficiándose de ayuda bilateral, aunque se retirará de forma muy progresiva.

La UE ha acordado concentrar su futura ayuda al desarrollo en los países más pobres y en menos sectores para aumentar el impacto y eficacia de la misma y en el caso de Latinoamérica el cambio de enfoque abrirá el camino hacia una asociación más estratégica entre ambas regiones para buscar soluciones a retos comunes a través de la cooperación regional, por ejemplo para combatir el cambio climático.

"Este paquete de ayuda constituye una nueva etapa en nuestra forma de trabajar con América Latina y envía una señal muy fuerte de nuestro compromiso para seguir apoyando los esfuerzos de desarrollo de la región. No le damos la espalda a ese continente; estamos mirando juntos en la misma dirección", ha asegurado el comisario de Desarrollo, Andris Piebalgs.

El comisario ha subrayado "la contribución de la UE a los avances impresionantes" en el continente en la última década, gracias a la ayuda al desarrollo europea y ha confiado en que "en este nuevo capítulo de nuestras relaciones, se verá cómo prospera nuestra asociación".

La UE priorizará las ayudas en seguridad, para promover la buena gobernanza e igualdad social y un crecimiento económico integrador y sostenible, así como para contribuir a la sostenibilidad medioambiental y la lucha contra el cambio climático y a programas de educación y formación para los jóvenes en el marco del programa Erasmus+. Los sectores han sido identificados previa consulta con los socios latinoamericanos.

Las ayudas regionales por su parte también priorizarán la promoción de un crecimiento económico integrador y insostenible abordando las diferencias estructurales, la desigualdad económica profunda y la confianza excesiva en la extracción de recursos naturales y la sostenibilidad ambiental, en una región especialmente expuesta al cambio climático y las catástrofes naturales.

Igualmente, promoverán el refuerzo de las capacidades de las instituciones estatales responsables de la seguridad y el Estado de Derecho para mejorar los Derechos Humanos y la igualdad de género, entre otros, mejorando la oferta de formación y facilitación de conocimientos técnicos, así como mejoras en la gobernanza y tanto la recaudación de impuestos como el gasto, para combatir la desigualdad, aumentar la cohesión social y atender la demanda social creciente de servicios públicos de calidad.

EUROSOCIALEl comisario abordará el nuevo paquete de ayuda con dirigentes políticos de la UE y de Latinoamérica en el marco de la conferencia EUROsociAL que acoge Bruselas y donde anunciará formalmente la nueva ayuda.

EUROsociAL se ha convertido en el programa insignia de la UE en Latinoamérica para combatir la desigualdad y promover la cohesión social -unos de los retos más importantes en la región pese al fuerte crecimiento de los últimos años- a través de un enfoque de cooperación Sur-Sur activa y basado en la obtención de resultados, a partir de objetivos claros y políticas públicas amplias.

El programa, al que la UE contribuye con 70 millones de euros entre 2004 y 2014, ha apoyado muchas iniciativas regionales en áreas como la administración fiscal, el desarrollo regional, la justicia y el diálogo económico y social, incluidos la reforma del sistema de información sobre el empleo en Colombia a fin de adecuar mejor la oferta y la demanda de empleo, la nueva ley de discapacitados en Honduras y la nueva política educativa en Brasil.