La UE decidida a negociar con La Habana
20 de enero de 2014
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Publicado por la Agencia Deutsche Welle, Alemania
Berlín, 20 de enero (DW).- La decisión de la Unión Europea de modificar su relación política con Cuba y finalizar la Posición Común que rige desde 1996 despierta controversia.
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea, incluidos Polonia y República Checa, que tradicionalmente han mantenido las posturas más críticas hacia la gestión del gobierno de Raúl Castro, han previsto autorizar en breve a la Comisión Europea establecer un nuevo marco de relaciones con las autoridades cubanas, de modo que para el 2015 Cuba deje de ser el único país con el que Bruselas sólo mantiene esporádicas colaboraciones y no un diálogo político formal.
Las transformaciones del raulismo, consideradas por los opositores cubanos en la isla y el exilio sólo como estrategias de supervivencia del gobierno, han sido fundamentales en este pacto entre los diplomáticos europeos, quienes buscan resolver el gran problema institucional que representa la Posición Común de la Unión Europea a la hora de dialogar con Cuba, desde que en 1996 fuera establecida por el gobierno de José María Aznar, condicionando el diálogo entre La Habana y Bruselas a reales avances en la defensa de los derechos humanos y las libertades de la isla.
La controversia está servida
La Habana, desde 1996, se refiere a la Posición Común como un "bloqueo económico" y, apenas se difundió la noticia de su posible levantamiento, han comenzado a proclamarla como una nueva victoria del socialismo, aprovechando, entre otras, las declaraciones del Ministro de Relaciones Exteriores de Holanda, Frans Timmermans, en su reciente visita a la isla: “Ya es tiempo de que la UE actualice sus relaciones con Cuba”, expresó el canciller holandés en conversación con el vicepresidente del Consejo de Ministros cubano, Ricardo Cabrisas, en momentos en que la economía cubana, fuertemente golpeada por la crisis de su primer socio comercial, Venezuela, intenta diversificar sus contactos con el mercado internacional.
El interés es mutuo: La Habana y Bruselas se beneficiarían mucho más económicamente si existiera un diálogo político. A pesar de los inconvenientes actuales, sin contar los fuertes vínculos generados por el turismo europeo hacia Cuba, la Unión Europea es el primer inversor extranjero en la isla y el segundo socio comercial, con cerca de 2.000 millones de euros en exportaciones, según cifras de la Embajada española en La Habana citadas por el diario El País.
¿18 años perdidos?
La oposición cubana de la isla y el exilio, por su parte, manifiesta preocupación ante este cambio hacia un gobierno que, aseguran, en más de medio siglo no ha cumplido mínimamente con las directrices principales de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y los Pactos de la ONU. “En 2013 se registraron más de 6.000 arrestos de disidentes, y más de un centenar de ellos fueron agredidos físicamente o sufrieron actos de repudio. La búsqueda de una normalización de las relaciones con La Habana pasa por encima de cada uno de esos casos, y deja más indefensos y solos a quienes luchan por los derechos humanos”, declara el editorial de Diario de Cuba, principal publicación opositora del exilio.
Ya estén a favor o en contra, los analistas coinciden en que la Posición Común no ha logrado los objetivos esperados luego de 18 años, como tampoco ha servido de nada el embargo comercial norteamericano que dura ya cinco décadas.