Destinar recursos para impulsar sistemas integrales de cuidados, que permitan abatir las desigualdades como la división sexual del trabajo y garantizar una distribución equitativa, no sólo es necesario, es urgente, afirmó Ana Güezmes García, directora de la División de Asuntos de Género de la Comisión Económica para América Latina (Cepal).
En particular en México, señala, se requiere universalizar el cuidado infantil, lo cual representaría una inversión promedio cercana al uno por ciento del producto interno bruto (PIB), pero con enormes retornos, pues tan sólo en empleo para mujeres representaría un aumento de 4.2 por ciento.
En el marco del Foro de Innovación e Inteligencia Artificial de Uruguay: El Camino hacia un Hub de Innovación Global, realizado este jueves 29, la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, afirmó que el país está “frente a un cambio tecnológico” que puede brindar la oportunidad de avanzar en términos de crecimiento económico y que dicha posibilidad permitirá al país alcanzar un nuevo estadio de desarrollo.
En el encuentro, realizado en instalaciones del Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU), participaron las ministras de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, e Industria, Energía y Minería, Elisa Facio; el canciller de la República, Omar Paganini, y el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn.
Durante el evento, Arbeleche destacó el rol de la innovación en la economía y aclaró que, como “hacedores de política económica”, es preciso facilitar el camino para un mayor crecimiento que resulte en “mejores vidas” para los uruguayos. En este contexto, se refirió a un crecimiento sostenible que incluya a toda la población y las futuras generaciones.
Asimismo, sostuvo que, en la búsqueda por crecer y ofrecer mejor calidad de vida, se encuentra en la inteligencia artificial una enorme oportunidad para aumentar el crecimiento de nuestra economía. Arbeleche señaló que, si bien el impacto de la inteligencia artificial “tardó en despegar”, en la actualidad, se halla presente en la vida cotidiana y en disciplinas como la medicina, la agricultura, el transporte, la seguridad, la educación y las finanzas, lo que, además, requiere una respuesta a la sociedad en diversos temas, como el acceso a datos, la elaboración de regulaciones y la creación de infraestructura.
Por otra parte, Arbeleche explicó que, como parte del aprovechamiento de las oportunidades que se le presentan al país, surgió, en 2022, el programa Uruguay Innovation Hub, con gobernanza transversal y una asignación presupuestal de hasta 10.000.000 de dólares anuales. Con esta iniciativa, se busca fomentar la ciencia, la tecnología y la innovación, para avanzar hacia “una economía y una sociedad basada en el conocimiento”, que, asimismo, atraiga inversiones, aumente el crecimiento potencial de la economía y produzca posiciones laborales “de calidad”.
También puntualizó que “el país está frente a un cambio tecnológico” que puede brindar la oportunidad de “dar un salto en términos de crecimiento económico” y que “Uruguay quiere aprovechar esta oportunidad” para llegar a un “nuevo estadio de desarrollo basado en la economía del conocimiento”.
En tanto, Paganini afirmó que “el mundo está en un momento de quiebre”, de oportunidad y de riesgo, y que la innovación es un elemento clave. En este sentido, añadió que América Latina puede saltearse el desarrollo por etapas, avanzar y ser “más innovadora que el más innovador”, aplicando talento y capacidad, con una visión global.
De forma complementaria, manifestó: “Estamos convencidos de que, con la seguridad jurídica del Uruguay y los activos que tenemos de toda la vida”, el país puede convertirse en un polo de innovación para la región. Asimismo, instó a considerar a Uruguay como “un lugar donde probar cosas nuevas en un mercado más controlado, más pequeño y más transparente”.
Facio expresó: “Nos encontramos en un momento crucial de la historia”, en que el dinamismo, los inventos y los avances tecnológicos están “redefiniendo nuestras economías, industrias y sociedad”. Añadió que la inteligencia artificial es una “realidad presente” que brinda instrumentos para resolver desafíos, entre los que desatacó la mejora de la competitividad y un desarrollo más sostenible.
Adicionalmente, enumeró algunas de las aplicaciones en Uruguay, como la gestión de los cultivos, la optimización del tiempo de secado de los granos de arroz y la predicción de la fertilidad y el desarrollo de enfermedades en el ganado. En otro orden, informó que el Ministerio de Industria, Energía y Minería promueve la instalación de infraestructura de inteligencia artificial para uso de los sectores público y privado.
Mediante el Foro de Innovación e Inteligencia Artificial de Uruguay se procura congregar a representantes políticos, empresariales, académicos y de la sociedad civil, de todo el mundo, con el propósito de intercambiar estrategias y mejores prácticas vinculadas a estas temáticas, así como fomentar la colaboración entre los sectores público y privado al respecto.
En la actualidad, el BID busca acelerar el uso de este instrumento en la región y, para ello, propone basarse en tres ejes: la gente, infraestructura de datos, e instituciones y gobernanza. Según el titular del mencionado organismo internacional, Uruguay puede convertirse en un modelo regional y mundial en inteligencia artificial.