La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) ratificó su apoyo y compromiso al Gobierno y presidente de Bolivia, a la vez que felicitó al presidente, Luis Arce, y al pueblo de ese país por derrotar en pocas horas los planes golpistas.
La declaración final de la X Cumbre Extraordinaria de jefes de Estado y de Gobierno del ALBA-TCP celebrada de manera virtual el miércoles ratificó que América Latina «es una Zona de Paz en la que estamos comprometidos a desterrar para siempre el uso o la amenaza del uso de la fuerza y donde los Estados impulsan procesos de integración, cooperación y relaciones de amistad, con el fin de garantizar la mayor estabilidad y desarrollo posible».
La Alianza exigió «al Gobierno del presidente (Javier) Milei que cese de inmediato el hostigamiento y la agresión contra el legítimo Gobierno de Bolivia, así como las injurias contra otros países del ALBA-TCP».
«Alertamos al mundo que el presidente argentino despliega hacia los gobiernos progresistas y de izquierda una política con inclinaciones imperialistas, que solo alientan al odio, la polarización y la desestabilización de pueblos dignos y soberanos», dice la declaración.
Asimismo, el ALBA-TCP denunció que «en el marco de la guerra híbrida se está desplegando una feroz guerra mediática y de redes sociales, un sistemático acoso, bloqueo económico y diversas formas de agresión política, encaminados a desacreditar al gobierno del presidente Arce».
Al respectó, el organismo acordó «orientar a los Embajadores de los países miembros del ALBA-TCP en todo el mundo, a desarrollar una campaña de información y difusión acerca de la verdad sobre lo que ocurre en el Estado Plurinacional de Bolivia y las amenazas que le acechan».
Por ello exhortó a los movimientos sociales, indígenas, trabajadores y estudiantes a mantenerse vigilantes para informar al mundo entero sobre posibles peligros contra el orden constitucional en Bolivia; a la vez que reafirmó que «ALBA-TCP continuará promoviendo la defensa de los recursos estratégicos que existen en Nuestra América de las intenciones voraces de actores ajenos a la región».
Durante su intervención, el presidente de Bolivia, Luis Arce, destacó la reacción espontánea del pueblo para defender la democracia y las organizaciones sociales, durante la toma de la Plaza Murillo, y denunció que la represión militar a la resistencia popular dejó 14 heridos por armas de fuego.
“Zúñiga fue aprendido y a los medios de comunicación declararon falsedades, buscando impunidad. Hay más de 100 involucrados de distintos grados, entre militares activos, pasivos y civiles involucrados”, precisó.