Brasil ha recibido 3,2 millones de turistas internacionales en los cinco primeros meses del año, lo que supone una cifra superior en un 8,6% respecto a la alcanzada entre enero y mayo de 2023, cuando el país fue destino turístico para algo más de tres millones de visitantes.
Asimismo, tan solo en mayo, han llegado al país un total de 335.652 turistas internacionales, un aumento del 14,8% respecto al mismo mes del año anterior. Desde 2020 el país no registraba tantos turistas en el quinto mes del año.
Según una encuesta del Ministerio de Turismo, en colaboración con Embratur y la Policía Federal, Argentina sigue siendo el principal país emisor. Desde principios de año, 1,1 millones de turistas del país vecino llegaron a Brasil. Le sigue Estados Unidos, que envió 298.000 viajeros internacionales, seguido de Chile, con más de 294.000 en suelo brasileño.
El aumento del flujo de turistas internacionales es un importante incremento financiero para la economía brasileña, especialmente en sectores como la hotelería, la gastronomía y el transporte, que dependen directamente del turismo, según ha destacado el ministro de Turismo, Celso Sabino.
"Con estos números prometedores, Brasil refuerza la imagen de estar a la cabeza de la lista de destinos más deseados en América Latina. La expectativa es que el sector siga creciendo en los próximos meses, principalmente con la realización de importantes eventos, como la reunión del G20 y Rock in Rio", ha apuntado.
El presidente de Embratur, Marcelo Freixo, ha celebrado el crecimiento del turismo internacional durante el período. "Hemos estado trabajando para que todo el mundo sepa que Brasil ha vuelto, como suele decir el presidente Lula. La gente quiere visitar nuestro país, que es diverso, continental y juega un papel fundamental en la solución de los problemas económicos y ambientales del mundo", ha sostenido.
POTENCIAR EL TURISMO
El Gobierno de Brasil ha desarrollado una serie de acciones para impulsar a Brasil como destino de viajeros internacionales, como mejorar la infraestructura turística, ampliar la conectividad aérea y realizar campañas de promoción en mercados turísticos potentes, principalmente para fortalecer la participación brasileña en grandes eventos y ferias internacionales.
Otra iniciativa reciente para atraer más turistas extranjeros es el Programa de Aceleración del Turismo Internacional (PATI), que prevé asociaciones público-privadas con aerolíneas y aeropuertos con foco en aumentar el número de vuelos internacionales a destinos brasileños.
En la primera ronda del programa, hubo un aumento en la oferta de más de 70 mil asientos en vuelos internacionales hacia Brasil. Se espera que el crecimiento represente 21.000 visitantes más, generando ingresos de aproximadamente 25 millones de dólares estadounidenses.