El pasado 25 de marzo, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) organizaron el Webinario "Diversificación inclusiva y transición energética: Oportunidades para América Latina". Este evento virtual reunió a destacados expertos y especialistas de la región para explorar los desafíos y oportunidades que enfrentan los países en desarrollo, especialmente aquellos dependientes de los productos básicos, en su búsqueda por lograr un crecimiento económico sostenible e inclusivo.
El propósito del webinario fue dar a conocer el informe Productos Básicos y Desarrollo 2023: Diversificación inclusiva y transición energética de la UNCTAD; y promover el diálogo sobre las oportunidades y los desafíos de la diversificación económica asociados a las cadenas de valor alrededor de los minerales, en el contexto de la transición energética.
En las palabras de bienvenida, Carlos de Miguel, Oficial a cargo de la División de Recursos Naturales (DRN) de la CEPAL, recalcó que la dependencia de los recursos naturales para el desarrollo de la región ha sido una constante a lo largo del tiempo y ha sido objeto de análisis en la CEPAL durante sus más de 75 años de existencia. Destacó que la aceleración de la transición energética y la electromovilidad ha generado una creciente demanda de minerales críticos, aumentando la presión sobre los países ricos en estos minerales para ampliar su capacidad de producción.
América Latina y el Caribe cuenta con una amplia diversidad de estos recursos minerales, posicionando a la región de forma privilegiada para apoyar la descarbonización de la economía, y para avanzar más allá del rol de proveedor de materias primas y diversificar y complejizar su entramado productivo. Para aprovechar las oportunidades y minimizar sus potenciales amenazas, será fundamental tener estándares de transparencia y socioambientales más estrictos y garantizar una distribución equitativa de los beneficios en la sociedad, especialmente en las comunidades directamente afectadas por las actividades mineras.
Por su parte, Miho Shirotori, Directora interina de la División de Comercio Internacional y de Productos Básicos (DITC) de la UNCTAD, resaltó que la motivación de este diálogo regional surgió por el informe de la UNCTAD, que examina la diversificación inclusiva, la transición energética y las políticas industriales verdes. Sin embargo, anotó que era necesario complementar el informe con discusiones sobre los impactos de esta diversificación económica, por ejemplo, en posibles efectos de desigualdad socioeconómica y el aumento de emisiones de gases de efecto invernadero, temas de interés para los países miembros cubiertos por la CEPAL.
Tras la apertura, el webinario estuvo organizado en dos partes. En la primera parte, Sofia Dominguez, Oficial para Asuntos Económicos de la Sección de Investigación y Análisis de Productos Básicos (CRAS) de la DITC-UNCTAD, presentó los hallazgos clave, los mensajes principales y las recomendaciones de política pública del Informe de la UNCTAD, con foco en la región de América Latina y el Caribe. Por ejemplo, se observó que todos los países de América del Sur son considerados dependientes de los productos básicos, una vez que al menos un 60% de sus exportaciones derivan de productos básicos mineros, agrícolas o energéticos.
En la segunda parte se contó con un espacio de reflexión y diálogo, estructurado en torno a las oportunidades y los desafíos de la diversificación económica asociados a las cadenas de valor alrededor de los minerales, en el contexto de la transición energética y del rol de la región en este proceso global. Participaron en este panel Clóvis Freire Junior, Jefe de la CRAS de la DITC-UNCTAD; Claudio Maggi, Gerente de Asuntos Corporativos de la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO) de Chile; Katiuska King, Docente de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de Universidad Central del Ecuador (UCE); y Víctor Fuentes, Gerente de Políticas Públicas del Instituto Peruano de Economía (IPE).
Los panelistas resaltaron la urgencia de promover la diversificación económica inclusiva como un medio para que los países reestructuren sus economías hacia un futuro más eficiente en términos energéticos, con bajas emisiones de carbono y efectos positivos en la reducción de las desigualdades sociales. En este contexto, se destacaron las experiencias de los países de la región para abordar la creciente demanda de minerales críticos, incluyendo iniciativas para escalar en las cadenas de valor relacionadas, promover la formación de clústeres de proveedores locales y fomentar una agenda de integración regional en el ámbito del desarrollo productivo. Además, se subrayó la importancia de adoptar una visión de largo plazo que busque el desarrollo social, la protección del medio ambiente y el avance de la transición energética regional hacia fuentes renovables. En este sentido, se enfatizó la necesidad de que el auge de los minerales críticos para la transición energética comparta beneficios equitativamente, minimice los impactos ambientales, respete las decisiones de las comunidades y fomente la participación de la sociedad en las decisiones relacionadas con el desarrollo económico y ambiental.
En conclusión, el seminario permitió abordar cómo los países en desarrollo dependientes de los productos básicos necesitan impulsar una estrategia integral para aumentar el valor añadido y su integración en las cadenas de suministro, con el fin de reducir la dependencia y promover la transición energética con objetivos económicos, sociales y ambientales. La CEPAL reafirmó el compromiso de trabajar con los países de América Latina y el Caribe hacia la diversificación económica inclusiva en el contexto de la transición energética, un tema cada vez más relevante para las Naciones Unidas.