Guatemala cerró 2023 con un nuevo récord de las remesas familiares recibidas al superar en 9,7 por ciento el monto durante el periodo anual anterior, confirmó hoy el Banco Central del país.
Los nacionales radicados en el extranjero, particularmente en Estados Unidos, enviaron un total de 19 mil 804 millones de dólares, por encima en mil 763,7 millones al pasado monto, detallaron las estadísticas divulgadas.
Los meses en los que más remesas familiares se recibieron fueron junio, con mil 861,3 millones de dólares, seguido de mayo, con mil 811,9 millones, según la entidad financiera.
Las divisas enviadas por los migrantes chapines, estimados en más de tres millones de personas, representan un 20 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de este Estado centroamericano.
Datos oficiales del Banco de Guatemala dan cuenta que desde hace más de una década, cada año las remesas recibidas marcan nuevos récords.
Esos recursos monetarios llegados desde el extranjero sirven para la supervivencia de alrededor de seis millones de los 18 millones de habitantes.
Los departamentos de Ciudad de Guatemala, Huehuetenango, San Marcos, Quetzaltenango, Petén, Alta Verapaz y Quiché concentran casi el 54 por ciento de esas erogaciones familiares.
Las remesas, principal motor de la economía guatemalteca, dejarían bien por detrás a las exportaciones dominantes en el comercio exterior, como vestuario, café y banano.
De acuerdo con las previsiones de las entidades monetarias respecto al cierre del presente año, el ingreso de estas divisas sobrepasaría los 20 mil millones de dólares.
Expertos describen que las condiciones de vida, la situación política y la inseguridad continuarán provocando la emigración.
El 59 por ciento de la población en Guatemala vive bajo el umbral de la pobreza y entre un 15 y 20 intenta sobrevivir en condiciones de pobreza extrema, señalan diferentes análisis.