El índice de precios de los alimentos que elabora la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) indica que los cereales registraron en septiembre un promedio de 147,8 puntos, es decir, un 1,5% menos que en agosto y un 11,2% por encima de su valor de septiembre de 20211.
En septiembre, los precios internacionales del trigo aumentaron un 2,2%,»impulsados por la incertidumbre acerca de la continuidad de la Iniciativa de Granos del Mar Negro después de noviembre y el posible efecto en las exportaciones de Ucrania». También contribuyó a reforzar los precios del trigo la preocupación por la sequía en Argentina y Estados Unidos, así como el ritmo acelerado de las exportaciones de la Unión Europea sumado a la mayor demanda interna de trigo del bloque en un contexto de mayor escasez de la oferta de maíz.
Los precios internacionales de los cereales secundarios volvieron a subir ligeramente (un 0,4%) en septiembre, mostrando tendencias dispares. Los precios mundiales del maíz se mantuvieron prácticamente estables (+0,2%), los de la cebada descendieron un 3,0%, sobre todo a causa de la mejora de las perspectivas sobre las cosechas en Australia y Rusia, mientras que los precios mundiales del sorgo aumentaron un 13,2% debido a la reducción de las perspectivas de producción en EEUU.
El índice de precios de la FAO para todos los tipos de arroz subió un 2,2% en septiembre. Los precios del arroz índica encabezaron este aumento, al subir en respuesta a cambios en la política de exportación de la India.
Precios mundiales de la FAO
El índice de precios de los alimentos registró un promedio de 136,3 puntos en septiembre, es decir, un 1,1% menos que en agosto, lo que representa su sexto descenso mensual consecutivo.
El descenso de septiembre obedeció a una brusca caída de los precios internacionales de los aceites vegetales y a descensos moderados de los del azúcar, la carne y los productos lácteos, que compensaron con creces el repunte del subíndice de precios de los cereales.