Las elevadas tasas de inflación y las previsiones de tipos de interés más altos atenuarán la sólida recuperación del consumo después de los confinamientos por la pandemia de coronavirus en Brasil, México y Chile, dijo el martes la agencia de calificación Moody's.
La fortaleza del consumo privado, que aporta con casi dos tercios del PIB de los tres países, dependerá en gran medida de la solidez de la confianza del consumidor en Brasil, la mejoría en la creación de empleo en Chile y de la situación de los salarios reales en México, dijo la firma en una nota de investigación.
México, la segunda economía latinoamericana, sufre por el elevado nivel de informalidad laboral que afecta la recuperación de los salarios, en el contexto de una inflación que podría haber alcanzado en la primera quincena de agosto casi el triple de la meta permanente del banco central, de acuerdo a analistas consultados en un sondeo de Reuters.
"Los salarios tras la inflación (en México) probablemente se mantendrán bajos, especialmente en el trabajo informal. En Brasil, los trabajadores están volviendo a trabajar, y los salarios del trabajo formal están aumentando con la inflación", indicó la nota.
Moody's destacó que el consumo se recuperó en la región producto del levantamiento de las restricciones por el COVID-19, en especial en Chile, donde el Gobierno autorizó una serie de medidas de incentivo para alentar la demanda minorista.
Pero ahora la nación sudamericana enfrenta el pesimismo de los consumidores producto de shocks internos y externos, como el estallido social de 2019, el impacto de la guerra en Ucrania y la incertidumbre derivada del proceso para redactar y sacar adelante una nueva Constitución, dijo Moody's.
En tanto, Brasil y México han visto una mejoría del consumo interno gracias a la reactivación de sus sectores de servicios, si bien las condiciones más ajustadas para los créditos minoristas podrían alterar la tendencia luego de que sus bancos centrales aplicaran fuertes incrementos de las tasas de interés.