Pocos pondrían en duda que la digitalización y el crecimiento del talento en la región de América Latina son dos de los grandes retos del sector empresarial. Pero, al mismo tiempo, crece un consenso en cuanto a la oportunidad gigante de crecimiento que reside en ellos.
Es justamente eso lo que plantea Red Hat, uno de los proveedores líderes en soluciones empresariales de código abierto, que formalizó esta semana su alianza con el Banco Interamericano de Desarrollo, BID.
La actual coyuntura requiere cada vez más servicios digitales y tecnológicos, pero existe una brecha importante entre la oferta y demanda de los talentos en el sector productivo. Si bien parte de esta brecha puede atribuirse a el enfoque de la educación en América Latina, lo cierto es que también existe una falencia en materia de acceso, con millones de personas en nuestros países sin siquiera una conexión básica para poder empezar a dar sus primeros pasos en el mundo digital.
Según el BID, alrededor de 244 millones de personas, un 32 % del total de habitantes de la región, carece por entero de acceso a Internet, en tanto que otros 77 millones cuentan con conexiones que no cumplen con los requisitos mínimos de calidad y estabilidad. En esa enorme cantidad de personas puede existir un vasto recurso de talento tecnológico, pero que resulta inaprovechado porque carecen de los medios para aprender nuevas destrezas y ponerlas en práctica.
¿En qué consiste?
Como una muestra de confianza en que es posible cambiar esta situación, Red Hat se incorporó oficialmente a la ‘Coalición de socios del sector privado para el futuro de América Latina y el Caribe’.
Esta es una alianza liderada por el BID para movilizar al sector privado hacia acciones más concretas en la búsqueda por el desarrollo sostenible. Esta alianza entre Red Hat y el BID se enfocará específicamente en el reconocimiento, la digitalización y el fortalecimiento de la cadena de valor.
“Desde el BID estamos muy entusiasmados de dar la bienvenida a Red Hat a la Coalición y colaborar en línea con tres de los cinco pilares de la Visión 2025 y nuestra agenda para promover la recuperación y desarrollo en la región, como lo son la digitalización, el fortalecimiento de las cadenas de valor y empoderamiento de la mujer. Estamos convencidos que la colaboración con socios del sector privado como Red Hat es fundamental para la recuperación de la región”, explicó el presidente del BID, Mauricio Claver-Carone.
Este tipo de alianzas son especialmente importantes para regiones como la nuestra, ya que en muchos casos la empresa privada tiene experticia invaluable implementando estos programas. Red Hat, siendo una de las empresas líderes del sector, también tiene conocimiento de primera mano en países como Colombia y en distintos sectores.
Red Hat se ha mostrado comprometida a trabajar en conjunto con el BID para mejorar las estadísticas de la región y fortalecer las iniciativas existentes.
“Esta alianza nos llena de orgullo ya que sigue reafirmando nuestro compromiso con los distintos ecosistemas y comunidades con las que trabajamos a diario de manera colaborativa, a través de soluciones de código abierto. Continuamos nuestro esfuerzo en áreas sociales que se alinean con el interés y las políticas del Banco en la región, por ejemplo, la transformación digital de los gobiernos, para aportar transparencia y eficiencia en la gestión, y también temas como la innovación basada en la diversidad e inclusión. Creemos que con este acuerdo nuestra experiencia generará un impacto mucho más importante dentro de la región”, afirmó Paulo Bonucci, vicepresidente Senior y General Manager de Red Hat Latinoamérica.
Una necesidad latente
Aunque Internet móvil ha logrado llegar a la mayoría de los municipios en países como Colombia, persisten falencias para soportar aplicaciones de videollamadas y garantizar conexiones estables y veloces.
Tras la pandemia se aceleró la digitalización de procesos y aspectos de la vida cotidiana que impactan negativamente a aquellos que no tienen acceso a la conexión o a las herramientas, un fenómeno que amenaza con ampliar la brecha de colectividad y que se suma al rezago de la región en temas de infraestructura digital.