El presidente de Bolivia, Luis Arce, suscribió el acuerdo para la construcción de una planta de producción de fertilizantes en aras de garantizar la seguridad y la soberanía alimentaria del país suramericano.
Arce participó de la firma de contrato para la construcción de la planta de fertilizantes granulados en Cochabamba, que demandará más de 33 millones de bolivianos y garantizará la producción de alimentos. La Empresa Boliviana de Industrialización de Hidrocarburos y la empresa constructora Sur Energy SRL Donec suscribieron el contrato para la construcción de la Planta de Producción de Fertilizantes Granulados Cochabamba (NPK).
El jefe de Estado destacó que este proyecto fortalecerá al sector agropecuario nacional, permitirá reducir los costos de producción, evitará la fuga de divisas y garantizará la soberanía alimentaria.
“No se trata (...) de una planta aislada que está por ahí sin objetivo, esta planta significa una parte de esta estrategia nacional para mejorar la productividad agropecuaria y convertirnos en un país que sea autosuficiente en la producción y consumo de sus propios alimentos, es decir, llegar a la seguridad con soberanía alimentaria”, dijo.
“Cuando estábamos en campaña electoral en 2020 hicimos un diagnóstico de la situación económica de nuestro país", señaló el mandatario.
"En ese momento, la preocupación fundamental era la pandemia (de Covid-19), la salud, educación, pero principalmente la preocupación sobre la economía nacional".
"En ese diagnóstico claramente resaltaba la baja productividad de la tierra, que se manifiesta con países vecinos que tienen mayor productividad y por lo tanto compiten con los precios del mercado internacional”, expresó el jefe de Estado.
Ante ese contexto, rápidamente se incorporó en el Plan de Gobierno la industrialización con sustitución de importaciones, con miras a reducir los costos de producción y a dejar de depender de la compra exterior de insumos que hacen daño a la balanza comercial boliviana.
También se identificó que uno de los productos de mayor utilización y de alto componente importado eran los fertilizantes, que hoy se utilizan en la producción del sector agropecuario.
“Por lo tanto, incluimos en nuestro Programa de Gobierno esto de la industrialización con sustitución de importaciones, en el entendido de que Bolivia tiene un enorme potencial y recursos naturales que se pueden industrializar y que pueden generar estos productos que estamos importando, como los fertilizantes”, manifestó Arce.
La falta en la producción de granos está haciendo que todos los países se dediquen a lo mismo y eso significa una mayor demanda de fertilizantes, semillas y otros en el planeta, comentó.
Destacó la reactivación de la Planta de Urea y Amoniaco que es uno de los componentes para la fertilización de la tierra y aseguró que la nueva planta aportará nuevos elementos químicos de nitrógeno, fosforo y potasio que son lo más importantes para la producción agropecuario.
El mandatario dijo que la nueva planta tendrá una singular importancia porque se podrá determinar el componente porcentual de cada uno de los elementos químicos en función de cada terreno fértil o no fértil que se tenga en el país.