La economista jefa del Banco Mundial, Carmen Reinhart, se mostró escéptica sobre la posibilidad de que la economía estadounidense y la mundial puedan evitar una recesión, habida cuenta del aumento de la inflación, las fuertes subidas de las tasas de interés y la ralentización del crecimiento en China.
Reinhart, que se reincorpora a la Universidad de Harvard el 1 de julio tras una excedencia de dos años en el servicio público, dijo que históricamente era una tarea difícil reducir la inflación y diseñar un aterrizaje suave al mismo tiempo, y que los riesgos de recesión son claramente un "tema candente" en este momento.
"Lo que preocupa a todo el mundo es que todos los riesgos se acumulan a la baja", dijo Reinhart a Reuters en una entrevista a distancia, citando una serie de golpes adversos y movimientos de la Reserva Federal para subir las tasas de interés tras una década y media de tipos ultrabajos y negativos.
La crisis financiera mundial de 2008-2009 afectó sobre todo a una docena de economías avanzadas y China era entonces un gran motor de crecimiento, pero esta crisis es mucho más amplia y el crecimiento de China ya no es de dos dígitos, sostuvo.
El Banco Mundial recortó este mes su previsión de crecimiento mundial en casi un tercio, a un 2,9%, para 2022, advirtiendo de que la guerra de Rusia en Ucrania se había sumado a los daños de la pandemia del COVID-19, y que muchos países se enfrentan ahora a la recesión.
Reinhart dijo que el crecimiento mundial podría caer al 2,1% en 2022 y al 1,5% en 2023, llevando el crecimiento per cápita a un nivel cercano a cero, si los riesgos a la baja se materializaran.
Al preguntársele si se podría evitar una recesión en Estados Unidos o en el mundo, Reinhart dijo: "Soy bastante escéptica. A mediados de la década de 1990, con el presidente de la Reserva Federal (Alan) Greenspan, tuvimos un aterrizaje suave, pero la preocupación por la inflación en ese momento era del 3%, no del 8,5%. No es que se puedan mencionar muchos episodios de endurecimiento significativo de la Fed que no hayan pasado factura a la economía".
Reinhart señaló que el gobierno de Biden no fue el único que juzgó mal el alcance del riesgo de inflación, señalando que la Fed, el Fondo Monetario Internacional y otros habían compartido esa opinión, aunque el Banco Mundial lo calificó tempranamente como un "riesgo real" .
"La Fed debería haber actuado -y lo vengo diciendo desde hace tiempo- pronto más que tarde y de forma más agresiva", dijo. "Cuanto más se espera, más draconianas son las medidas que hay que tomar".