La pobreza en América Latina y el Caribe, concretamente en República Dominicana, podría alcanzar este año hasta al 33% de la población, mientras que se prevé que la pobreza extrema alcance el 14,5%, en parte, como consecuencia indirecta de la guerra en Ucrania.
Así se desprende de un estudio publicado por la Cepal, la comisión de América Latina adscrita a Naciones Unidas, que especifica que las tasas esperadas para este año representan un aumento de 0,9 puntos y 0,7 puntos porcentuales frente a 2021, respectivamente.
Los precios más altos de los combustibles y los problemas de suministro de fertilizantes y trigo provocados por la invasión rusa han avivado la inflación al tiempo que intensifican el hambre, lo que genera dudas sobre las perspectivas de crecimiento de la región, agregó la agencia de la ONU.
Por países, entre los que se espera un incremento de más de un punto en su tasa de pobreza este año están México, Colombia, Brasil y Paraguay, es decir, los países que más contribuyen a que 7,8 millones de personas se sumen a los 86,4 millones que ya sufren de inseguridad alimentaria en la región.
“Estos niveles son marcadamente más altos que los observados antes de la pandemia y hacen más lejana la posibilidad de una pronta recuperación”, aseguró el secretario ejecutivo de la Cepal, Mario Cimoli.
El brazo de la ONU correspondiente a América Latina había recortado recientemente sus estimaciones de crecimiento económico regional para 2022 desde 2,1% a 1,8%, citando las perturbaciones económicas causadas por el conflicto en Ucrania.