La presidente de Honduras, Xiomara Castro, se sumó al rechazo a participar en la Cumbre de las Américas si se excluye a Cuba y Venezuela. A la negativa del presidente Andrés Manuel López Obrador y de su homólogo de Bolivia, Luis Arce, de no acudir a la Cumbre de las Américas si Estados Unidos veta a Cuba, Venezuela y Nicaragua, se le sumó esta tarde la presidenta de Honduras, Xiomara Castro de Zelaya.
A través de un mensaje de Twitter, la mandataria hondureña, quien tuvo una reunión la semana pasada con el presidente mexicano, evocó al político y diplomático José Cecilio del Valle, al señalar que si no se convocaba a todas las naciones del continente a dialogar no se podría hablar de una verdadera cumbre americana.
“Si no estamos todas las naciones, no es Cumbre de las Américas. ‘El estudio más digno de un americano es América'”, escribió Castro.
Más temprano, Luis Arce, presidente de Bolivia, declinó a participar en la Cumbre organizada por Estados Unidos en junio próximo si la administración Joe Biden decide excluir a Cuba y Venezuela del encuentro.
“Consecuente con los principios y valores del Estado Plurinacional de Bolivia, reafirmo que una Cumbre de las Américas que excluye a países americanos no será una Cumbre de las Américas plena, y de persistir la exclusión de pueblos hermanos, no participaré de la misma”, expuso el boliviano.
Desde hace una semana, el presidente López Obrador ha manifestado abiertamente su rechazo a la exclusión de Cuba del encuentro de naciones al considerar que en estos momentos se debe privilegiar el diálogo entre la región aún cuando existan diferencias de pensamiento.
Ante dichos reclamos, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, acudió ayer a cabildear con el mandatario su asistencia a la Cumbre bajo el argumento que la Casa Blanca aún no ha determinado que países serán invitados a la reunión.
En entrevista con el diario español El País, el subsecretario de Estado para el Hemisferio Occidental, Brian Nichols, insistió que Biden no tiene pensado invitar a la Cumbre a países que no comulguen con los principios democráticos que Estados Unidos defiende.
“Hay un sentimiento y una visión democrática en las Américas y vamos a respetar eso. Y, por lo tanto, no nos parece conveniente incluir a países que falten al respeto a la democracia”, comentó el político al rotativo aunque matizó señalando que la Casa Blanca aún no emite las invitaciones del evento que se realizará en junio en Los Ángeles.