El precio de los combustibles aumentó en América Latina como consecuencia de las sanciones internacionales tras la operación militar rusa en Ucrania y su impacto en el mercado mundial del petróleo. Te contamos cómo afectó en algunos países de la región.
Tras el conflicto, EEUU vetó las importaciones de crudo y gas desde Rusia, segundo productor de petróleo del mundo, una decisión a la que se adhirió el Reino Unido aunque de forma más gradual.
La Unión Europea podría seguir los mismos pasos. Esto provocó un fuerte impacto en el valor del petróleo en el mercado internacional que motivó a que varios países tomaran medidas e incluso llegaran a subsidiar los combustibles.
América Latina no escapa de los coletazos y el jueves 10 de marzo la petrolera brasileña Petrobras anunció la más alta suba del precio de los combustibles desde enero de 2021: 18,8% de aumento para la gasolina y 24,9% en el diésel. Hasta ese momento, el litro de gasolina en Brasil valía 7 reales (1,4 dólares).
De igual forma, en México, los precios de los combustibles tienden al alza. Pese a los intentos de Hacienda de mitigar la magnitud del aumento de su valor, el litro de gasolina premium llega a venderse a 29 o 30 pesos (1,4 dólares) en algunas estaciones de Shell.
El barril de petróleo alcanzó los mayores valores desde hace más de una década, superando los 130 dólares y tan solo en febrero, los combustibles subieron 8,49%, valores por encima de la inflación, que llegó a superar los 7 puntos.
Es por eso que México impulsó medidas fiscales que implican reducción de impuestos en primera instancia en vendedores e importadores de gasolina, que aunque no tienen la obligación de replicar la iniciativa hacia el consumidor final, las comunicaciones del Gobierno sobre qué empresas poseen los precios más accesibles busca incidir en el consumo.
Argentina, en tanto, aumentó sus precios el lunes 14 en ciudades como Buenos Aires, Córdoba y Rosario debido al incremento del valor del petróleo en el mercado internacional. La tarifa en el país para la nafta se incrementó un 9,5% mientras que otros productos premium se elevaron 11,5%.
En Buenos Aires, de acuerdo a precios de la petrolera YPF, el litro de nafta pasó a valer de 99 pesos argentinos a 109,9 (alrededor de 1 dólar), valor bajo en comparación con otras provincias, donde superó los 118 pesos argentinos.
En el país vecino Uruguay, el Gobierno había decretado un aumento en los combustibles el 28 de febrero. La nafta y el gasoil incrementaron 1,5 pesos uruguayos (unos 0,03 dólares) y 1 peso uruguayo (0,02 dólares) por litro, respectivamente. Según datos de la Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Pórtland (ANCAP), la nafta alcanzó un máximo de 74,88 pesos uruguayos, mientras que el gasoil puede llegar a valer 67,3.
En EEUU el precio de la gasolina alcanzó los 4,25 dólares por galón —3,7 litros—, una cifra récord que se espera continúe en aumento.
Si bien los precios se vieron considerablemente alterados tras la decisiones impulsadas por EEUU y Reino Unido —el precio del barril Brent, índice de referencia europeo llegó a 123,21 dólares, mientras que el de West Texas Intermediary (WTI), referencia estadounidense, alcanzó los 119,40 dólares, un 27% y 30% más respectivamente, desde el inicio del conflicto en Europa del Este el pasado 24 de febrero.
Se presume que la toma de medidas por parte de la Unión Europea podrían hacer tambalear aún más el mercado internacional.