La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, ha advertido que la recuperación económica de la región este año "es el reflejo de un rebote estadístico" que conducirá a una senda de bajo crecimiento a partir de 2022. Así lo reportó Europa Press.
Durante la conferencia anual del Banco de desarrollo de América Latina (CAF), Bárcena ha recordado que el crecimiento estimado para la región este año es del 5,9%. "Este año vamos a crecer un 5,9%, pero no es suficiente para comenzar la recuperación. En 2022 va a haber una ralentización del 2,9% que refleja la asimetría en el acceso a la vacunación", ha advertido Bárcena durante su intervención.
Además, la máxima representante de Cepal ha apuntado que en la recuperación latinoamericana hay una dinámica "preocupante" relacionada con la "reprimarización" de la economía, es decir, la recuperación ligada al aumento de precios de materias primas o 'commodities'.
Entre otras carencias de la reactivación económica en la región, la secretaria ha resaltado los bajos niveles de inversión, que actualmente se encuentran nueve puntos por debajo de la media mundial del 26,2%.
De su lado, la informalidad ha alcanzado un nivel del 58,7%, cuatro puntos más que a comienzos de 2020, influyendo de manera más notable en la desigualdad latinoamericana e impulsando los índices de pobreza de la región, que han pasado del 30,5% al 33,7% de la población. Es decir, 22 millones de personas más que en 2019 y un total de 208 millones de personas.
En términos de pobreza extrema, la región cuenta con 78 millones de personas que no disponen de los recursos para satisfacer al menos las necesidades básicas de alimentación, ocho millones más que en 2019.
Para reparar todos estos males, Bárcena ha recomendado empezar por elaborar una política fiscal progresiva que se enfoque en la lucha contra la evasión fiscal, además de un plan de atracción de inversión que aporte liquidez a la región y empleo en sectores como la transición energética, la electromovilidad o la industria farmacéutica.
Por último, Bárcena ha comentado que los Derechos Especiales de Giro (DEG) impulsados por el Fondo Monetario Internacional (FMI) deberían readjudicarse desde los países desarrollados a aquellos de renta media.