La cooperación entre China y América Latina y el Caribe ofrece una oportunidad para reducir las asimetrías globales y apoyar una recuperación económica transformadora inclusiva que promueva el desarrollo sostenible en línea con la Agenda 2030, afirmó hoy Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en la clausura del II Foro Académico de Alto Nivel CELAC-China y el VI Foro de Think Tanks China-América Latina y el Caribe.
“La crisis del COVID-19 ha agudizado las asimetrías globales entre los países desarrollados y los en vías de desarrollo. Esto nos obliga a repensar el multilateralismo y, en este marco, la cooperación entre China y la CELAC, para dar respuestas colectivas a los efectos combinados de la pandemia, del cambio climático y a las crecientes desigualdades en términos de ingreso, riqueza, de economía digital y de acceso al financiamiento”, afirmó la alta funcionaria de las Naciones Unidas durante el cierre del encuentro que reunió por dos días a funcionarios de gobierno, especialistas universitarios y funcionarios internacionales.
La reunión fue coorganizada por la CEPAL con el Instituto de América Latina y el Buró de Cooperación Internacional de la Academia China de Ciencias Sociales (CASS, por sus siglas en inglés), el Instituto de Relaciones Exteriores del Pueblo Chino, el Instituto de Estudios Internacionales de China, la Fundación China de Estudios Internacionales y la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (UDUAL) y contó con el apoyo de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México (SRE) y el Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
Durante su intervención, Alicia Bárcena subrayó que China y la CELAC se encuentran ante una nueva era de cooperación, pero también ante un contexto global muy complejo.
“América Latina y el Caribe debe buscar mantener, cultivar y profundizar relaciones constructivas, armónicas y respetuosas con todos los actores del sistema internacional, con la brújula puesta en sus propios intereses, en la tarea impostergable de construir su propia ruta al desarrollo”, destacó.
La alta funcionaria agregó que la región requiere con urgencia dar un salto de calidad en innovación, en diversificación productiva, que le permita dejar atrás la senda de baja inversión, de escaso progreso técnico, y superar la pobreza y la desigualdad.
“La gran tarea pendiente de América Latina y el Caribe es avanzar hacia una mayor integración con una visión más pragmática, para que los 32 países que componen la CELAC puedan actuar en conjunto en temas estratégicos tales como el acceso y producción de vacunas, la economía digital, la protección de la biodiversidad, la acción climática y coordinar sus esfuerzos en torno a las reglas de comercio, propiciar en conjunto una inversión extranjera directa de calidad desde China y lograr mejores condiciones de financiamiento internacional particularmente hacia los países de ingresos medios”, afirmó.
La Secretaria Ejecutiva de la CEPAL destacó que China cuenta con una visión de largo plazo y tiene claridad de sus horizontes y metas. Ha logrado avanzar en innovación tecnológica y superación de la pobreza con gran rapidez y eficacia.
“Por ello, creemos que es muy importante estudiar y entender a fondo la Iniciativa de la Franja y la Ruta y evaluar la participación de los países de la región en formatos que cada país decida -más allá de los 19 países que ya se han incorporado a ella- sea para avanzar en la conectividad digital, aérea o marítima o bien en aspectos sanitarios o culturales”, señaló.
Destacó la positiva respuesta de China a la región en el acceso y compra de vacunas contra el COVID-19, y subrayó la oportunidad de impulsar la producción conjunta de vacunas con China y otros países con base en las iniciativas de cooperación ya existentes en Brasil, Chile, Colombia y México.
En esa línea, afirmó que las contribuciones de China serán esenciales para la implementación del plan de autosuficiencia sanitaria en América Latina y el Caribe, aprobado por unanimidad en la VI Cumbre de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) el pasado 18 de septiembre.
La Secretaria Ejecutiva de la CEPAL subrayó también que China y América Latina y el Caribe pueden colaborar para fomentar un desarrollo verde, limpio y bajo en carbono. Sectores como la transición de la electricidad hacia las energías renovables y los vehículos eléctricos y el transporte público son áreas nuevas e interesantes para la industrialización verde y la acción climática que demanda el Acuerdo de Paris, destacó.
Agregó que un área de gran potencial es la posibilidad de atraer a la región inversiones chinas en economía digital directa y para conectar además a los 66,2 millones de hogares que hoy tienen acceso muy limitado a internet.
“Es imperativo mejorar la infraestructura digital de la región. China y América Latina y el Caribe deben trabajar juntos para lograr el acceso universal para una sociedad digital inclusiva y para avanzar hacia la 5G y la inteligencia artificial”, aseveró.
Finalmente, la máxima representante de la CEPAL subrayó que el Foro China-CELAC es el lugar ideal para trabajar hacia una cooperación más profunda.
“Con 32 países miembros, la CELAC es un espacio común para alinear prioridades y coordinar un diálogo abierto con la región en su conjunto”, concluyó.
La sesión de clausura fue moderada por Lan Lijun, Presidente de la Fundación China de Estudios Internacionales y contó con la participación de Wang Chao, Presidente del Instituto de Relaciones Exteriores del Pueblo Chino y las intervenciones de Xu Bu, Presidente del Instituto de Estudios Internacionales de China, Chai Yu, Directora General e Investigadora del ILAS-CASS y José Ignacio Martínez Cortés, miembro de la Red de universidades e Instituciones de Educación Superior de América Latina y Caribe (UDUAL) y profesor del Centro de Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional Autónoma de México.