Ciertas amenazas a indocumentados en el estado de Nueva York ahora serán penalizadas según una ley recientemente firmada por la gobernadora. Laura Sepúlveda, corresponsal de la Voz de América en Nueva York, nos cuenta los detalles.

Amenazar en Nueva York a un inmigrante con reportarlo a las autoridades por su estatus legal, puede ser ahora considerado un crimen según el documento firmado por la gobernadora Kathy Hochul.

"Esta legislación protegerá a los neoyorquinos de los malos actores que utilizan la extorsión o la coacción debido a su estado migratorio, y hará que nuestro estado sea más seguro contra amenazas e intimidaciones viles"

El proceso criminal se atenderá como cualquier otro, con pruebas y en corte, explica Claudia Bernal, abogada de inmigración.

“La persona acusada de agredir verbalmente y amenazar a un indocumentado, tendrá como todos, el derecho de defensa, esto es un principio constitucional [...] No va a haber una sanción automática definitivamente se le va a dar la oportunidad de defenderse”

La ley firmada por la gobernadora tras ser aprobada por la asamblea del estado, no se hace efectiva inmediatamente. Ahora deberá pasar por un proceso legislativo que definirá la contundencia de la condena. Proceso que no tiene un estimado de tiempo, pero que tendría que respetarse aunque cambiase la administración. New York Immigration Coalition, explica que es una ganancia, pero aún no un triunfo.

"El estado de Nueva York no tiene ninguna política de santuario en este momento, no tiene ninguna política en los libros sobre la limitación de la cooperación entre las agencias locales o estatales y ICE o la patrulla fronteriza, la ciudad de Nueva York tiene algunas de las políticas"

Por lo que señala que aunque este anuncio da un aire de tranquilidad ante amenazas en el estado, la protección a esta población es más contundente a nivel de ciudad lo que hace que aún no canten victoria. Pese a ello, migrantes celebran el anuncio.

"Los latinos somos los que más trabajamos. Trabajos que mucho americanos no quieren trabajar por el mínimo salario que dan, por eso es que como migrantes no nos quejamos, nos conformamos con lo poco que nos dan"

"Me parece buena la idea y yo creo que es un respeto para los que ahora sí somos ilegales"