LA PAZ, Bolivia (AP) — El gobierno boliviano busca regularizar la situación migratoria de extranjeros -en su mayoría venezolanos y haitianos- que ingresaron al país sin seguir los trámites legales con el fin de evitar que caigan en redes trata y tráfico de personas.
“Esta regularización migratoria beneficiará aproximadamente a 3.500 personas” de distintas nacionalidades, informó el miércoles el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, en conferencia de prensa.
Uno de los decretos extiende a dos años la permanencia temporal de los extranjeros con el requisito de que presenten una declaración jurada para regularizar su situación migratoria.
La segunda norma libera del “pago de multas y otras sanciones más gravosas”, explicó el Del Castillo.
Además se creó una plataforma informática para monitorear el flujo de las migraciones, los arraigos, las alertas migratorias, las permanencias y residencias de personas extranjeras.
La medida se da después que en los últimos meses se registrara en Bolivia un fuerte ingreso de extranjeros, en su mayoría venezolanos y haitianos, aunque aún no hay un número exacto de cuántos han llegado al país.
La nación andina está en el centro de Sudamérica y tiene una basta frontera que en ocasiones es usada por redes de trata y tráfico de personas.
El ministro explicó que los decretos también aplican para otros ciudadanos de distintas nacionalidades, pero resaltó que la situación de los venezolanos y haitianos no es permanente sino que pasan por territorio boliviano para llegar a un tercer país.
“Consideramos que la amnistía migratoria será una oportunidad para toda la población que en este momento se encuentra irregular, que no está accediendo al ejercicio de sus derechos”, mencionó la Defensora del Pueblo, Nadia Cruz.