El Ministerio de Telecomunicaciones de Chile anunció el despliegue de un nuevo cable submarino en el país para interconectar la costa del Pacífico latinoamericano, con puntos de amarre en Chile, Perú, Ecuador y Guatemala.
La ministra de Transportes y Telecomunicaciones, Gloria Hutt, señaló desde Arica (norte), uno de los puntos de amarre del cable en Chile, que estas instalaciones "son fundamentales para la conectividad digital, ya que son la infraestructura base de Internet".
"Por ello, celebramos el despliegue del cable Mistral, pues a través de este, se transmitirán el 99 por ciento de los datos de Arica con diversos puntos del país, algo fundamental ahora que estamos viviendo una pandemia, a raíz de la cual muchas actividades se realizan remotamente", dijo.
Asimismo, la subsecretaria de Telecomunicaciones, Pamela Gidi, agregó en la misma instancia que el cable "Mistral" o "South Pacific Submarine Cable" (SPSC) servirá como una carretera submarina que conectará a los ciudadanos de la región de Arica y Parinacota con el resto de las regiones de Chile, así como con otros países mediante servicios de alta velocidad y calidad.
"Esta infraestructura contribuirá a mejorar la calidad de servicio para miles de habitantes del país y será fundamental para el desarrollo de 5G, red que permitirá el acceso a la masificación de la telemedicina así como nuevas prestaciones de la economía digital 4.0", complementó.
En la línea chilena, este cable submarino contará con aproximadamente 7.300 kilómetros y contempla una capacidad de 132 Terabytes por segundo (Tbps), lo que mejorará "considerablemente" la conectividad de millones de personas tanto en Chile como en Latinoamérica, detalló el Ministerio de Telecomunicaciones en un comunicado.
La cartera destacó también que en Chile tendrá puntos de amarre en Valparaíso (centro) y Arica, lo que añadirá resiliencia a las comunicaciones desde la zona centro al norte grande del país.
"De esta manera, las comunicaciones serán más robustas y podrán hacer frente a episodios críticos como son los eventos naturales y la creciente demanda de conectividad futura", explicó.