Los pequeños agricultores, que requieren políticas e inversiones públicas de respaldo, producen alrededor de 35 por ciento de los alimentos en el mundo, señaló un nuevo informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en su sede en esta capital.
El estudio de la FAO considera que existen actualmente más de 608 millones de explotaciones familiares en todo el mundo, las cuales ocupan entre 70 y 80 por ciento de las tierras agrícolas y producen alrededor de 80 por ciento de los alimentos mundiales en términos de valor.
Cinco de cada seis explotaciones tienen una superficie inferior a dos hectáreas, operan solo en 12 por ciento de los terrenos agrícolas totales y producen algo más de un tercio de todos los alimentos. Las de menos de una hectárea son 70 por ciento de las explotaciones y operan apenas siete por ciento de las tierras agrícolas.
Por contraste, solo uno por ciento de las explotaciones de mayor tamaño en el mundo, es decir, las de más de 50 hectáreas, ocupan 70 por ciento de las tierras agrícolas, y cerca de 40 por ciento de esos terrenos corresponden a fundos con más de 1000 hectáreas cada uno.
Marco Sánchez, de la División de Economía Agroalimentaria de la FAO, advirtió que “debe evitarse el uso de los términos ‘explotaciones familiares’ y ‘pequeñas explotaciones’ de manera intercambiable, pues la mayoría de las familiares son pequeñas, pero algunas son mayores e incluso de gran tamaño”.
Las contribuciones de los pequeños agricultores al suministro de alimentos varían enormemente entre países. En China, por ejemplo, representan 80 por ciento, 47 por ciento en India y 35 por ciento en África subsahariana, si se excluye a Nigeria.
En Nigeria aportan solo cinco por ciento, apenas uno por ciento en Brasil, y cuatro por ciento en el resto de América Latina y el Caribe.
Excluida China, los países del este de Asia y el Pacífico reciben 44 por ciento de sus alimentos de pequeñas explotaciones agrícolas, 40 por ciento en el sur de Asia (excluida India), 20 por ciento en el Medio Oriente y Norte de África, y ocho por ciento en Europa y Asia central.
El tamaño de las explotaciones aumenta con el nivel promedio de ingresos de los países, pues 99 por ciento de ellas en países de ingresos altos tiene más de cinco hectáreas, en comparación con solo 28 por ciento en los países de ingresos bajos.
Los factores regionales y locales también son reveladores. Las pequeñas explotaciones ocupan un porcentaje mucho mayor de los terrenos agrícolas que la media mundial en regiones como el Asia meridional y el África subsahariana, entre 1,4 y 1,6 hectáreas en promedio.
En América Latina y el Caribe, y en Europa y Asia Central, el tamaño promedio de las explotaciones agrícolas bordea las 40 hectáreas.
La FAO considera que estas precisiones son valiosas para las organizaciones y los encargados de formular políticas y dirigir inversiones destinadas a respaldar la agricultura familiar, incrementar la productividad de los pequeños agricultores y mejorar los medios de vida rurales.
Igualmente los valora dentro de estrategias para el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para 2030, entre ellos el ODS 1 (erradicar la pobreza), 2 (poner fin al hambre), 10 (abordar las desigualdades) y 12 (lograr modalidades de producción más sostenibles).
La organización considera que las políticas de inversiones e incentivos deben ser diferentes para las grandes explotaciones agrícolas en países de desarrollo alto y medio, y las debidas para los pequeños agricultores en los países en desarrollo.
El estudio advierte que se avanzaría más con datos de mayor precisión, sobre el tamaño de las explotaciones y su relación con los tipos de productos, modalidades de empleo prevalentes, o ingresos y residencias de los propietarios, para lo que se requieren mejoras en los censos agrícolas nacionales.