A esa cifra se suman cerca de 300 millones de seres humanos que sufrirán inseguridad alimentaria, según un informe de esa entidad de la ONU divulgado en esta jornada.
El análisis señala que en América Latina la caída de la producción este año será del 7,6 por ciento y países como Argentina y México se verán seriamente afectados al igual que las naciones caribeñas, las cuales enfrentarán una devastación sin precedentes.
La Unctad considera útiles los paquetes de ayuda financiera adoptados principalmente por las economías avanzadas para contribuir al esperado repunte en la segunda mitad del año, el cual ocurrirá en 2021, pero de manera desigual entre países.
Respecto al mercado laboral, el estudio indica que aun cuando se recupere la economía, el desempleo continuará y en muchas naciones persistirán las brechas de ingresos y las deudas.
En tanto, los flujos de inversión extranjera directa se reducirán en más de 40 por ciento y las remesas caerán más de 100 mil millones de dólares.
Frente a una profunda recesión mundial en medio de la pandemia, el mundo necesita un plan de recuperación global capaz de devolver incluso a los Estados más vulnerables a una posición más fuerte de la que tenían antes de la Covid-19, afirma la Unctad.