Ningún país puede simplemente “pretender” que la pandemia se acabó, y el regreso de los niños a la escuela y de los adultos a su lugar de trabajo debe hacerse de manera segura, aseguró la agencia de salud de la ONU. Los expertos de la agencia explicaron los pasos que deben seguir las naciones para tomar control de la transmisión del coronavirus.
Reabrir las economías y las sociedades sin tener control sobre la transmisión del COVID-19 es una “receta para el desastre” advirtió el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS) durante su conferencia de prensa habitual este lunes.
Tedros Adhanom Gebreyesus aseguró que, a ocho meses del comienzo de la pandemia, la Organización comprende que las personas están cansadas y anhelan continuar con sus vidas, así como los países quieren que sus economías vuelvan a funcionar.
“Eso es lo que también quiere la OMS. Los pedidos para quedarse en casa y otras restricciones son algo que algunos países sintieron que debían hacer para aliviar la presión sobre sus sistemas de salud. Pero se han cobrado un alto precio en los medios de vida, las economías y la salud mental”, dijo.
Agregó que la Organización apoya plenamente los esfuerzos de reapertura: “queremos que los niños regresen a la escuela y las personas que regresen al lugar de trabajo, pero queremos que se haga de manera segura”, explicó.
Tedros recalcó que ningún país puede simplemente fingir que la pandemia ha terminado ya que la realidad es que este coronavirus se propaga fácilmente, puede ser fatal para personas de todas las edades y la mayoría de las personas siguen siendo susceptibles a contagiarse.
“Si los países se toman en serio la apertura, deben tomar en serio la supresión de la transmisión y la importancia de salvar vidas. Esto puede parecer un equilibrio imposible, pero no lo es, se puede hacer y se ha hecho. Pero solo se puede conseguirr si los países tienen el control de la transmisión, cuanto más control tengan sobre el virus, más se pueden abrir. Reabrir sin tener el control es una receta para el desastre”, dijo.
El director de la OMS delineó cuatro cosas esenciales que todos los países, comunidades, e individuos deben hacer para obtener el control sobre la enfermedad.
“El COVID-19 se propaga de manera muy eficiente entre grupos de personas. En muchos países, hemos visto brotes masivos relacionados con reuniones de personas en estadios, clubes nocturnos, lugares de culto y otras multitudes”, expresó Tedros.
El experto aseguró que prevenir este tipo de eventos que expanden el virus es esencial, pero que sí se pueden realizar reuniones de manera segura en algunos lugares.
“Las decisiones sobre cómo y cuándo permitir las reuniones de personas deben tomarse con un enfoque basado en el riesgo, en el contexto local. Es posible que los países o comunidades que experimenten una transmisión comunitaria significativa deban posponer los eventos durante un período breve para reducir los riesgos”, dijo.
Agregó que, por otro lado, los países o comunidades con casos esporádicos pueden encontrar formas creativas de realizar eventos minimizando el riesgo.
Al respecto, la epidemióloga líder de la OMS, Maria Van Kerhkove , hizo un llamado a los jóvenes para que se unan a la Organización en buscar maneras alternativas para llevar a cabo actividades sociales de manera segura.
“Vi hace poco que se hizo un evento con Dj´s al que las personas atendieron manteniéndose dentro sus autos”, comentó como ejemplo.
Para la OMS es crítico reducir las muertes protegiendo a los grupos vulnerables, incluidas las personas mayores, las personas con enfermedades subyacentes y los trabajadores esenciales.
“Los países que hacen esto bien pueden hacer frente a bajos niveles de transmisión a medida que se abren”, explicó Tedros.
Al proteger a quienes están en mayor riesgo, los países pueden salvar vidas, evitar que las personas se enfermen gravemente y aliviar la presión sobre sus sistemas de salud.
Las personas deben desempeñar su papel tomando las medidas que está comprobado que funcionan para protegerse a sí mismas y a los demás: mantenerse al menos a un metro de distancia de los demás, lavarse las manos con regularidad, practicar la etiqueta respiratoria de cubrirse al toser y estornudar y usar una mascarilla.
“Evite las "tres C": espacios cerrados, lugares concurridos y entornos de contacto cercano”, explicó Tedros.
Los Gobiernos deben tomar acciones a medida para encontrar, aislar, probar y atender casos, y rastrear y poner en cuarentena a los contactos.
“Los pedidos generalizados de quedarse en casa pueden evitarse si los países adoptan intervenciones temporales y geográficas”, dijo Tedros.
Para apoyar a los países en sus esfuerzos de reapertura, la OMS tiene una variedad de orientaciones basadas en evidencia, que se pueden aplicar en diferentes escenarios de transmisión. Recientemente se publicó una
Entre marzo y junio de 2020 el 90% de los países del mundo experimentaron interrupciones en los servicios básicos de salud, con un impacto mayor en las naciones de medianos y bajos recursos, asegura una nueva encuesta publicada por la Organización Mundial de la Salud.
Según la OMS, la mayoría de los países informaron que se suspendieron muchos servicios de rutina y electivos, mientras que la detección y el tratamiento del cáncer y la terapia del VIH, ha experimentado interrupciones de alto riesgo en los países de bajos ingresos.
“En todos los países, los sistemas de salud se han visto sometidos a una presión extrema y queda por ver el verdadero impacto de la pandemia en términos de aumento de otras enfermedades y las muertes derivadas”, advirtió Tedros.
Otros importantes servicios afectados fueron los de urgencias. Las clínicas de servicio 24 horas se vieron afectadas en el 22% de los países, las transfusiones de sangre urgentes se interrumpieron en el 23% de las naciones, y la cirugía de emergencia se vio afectada en el 19%.
“La encuesta muestra que hasta el 70% de los servicios se han interrumpido para los servicios esenciales, incluida la inmunización de rutina, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades no transmisibles, la planificación familiar y la anticoncepción, el tratamiento de trastornos de salud mental y el diagnóstico y tratamiento del cáncer”, explicó el director.
La OMS recomienda a los Estados que realicen una clasificación de los servicios para identificar prioridades, realicen consultas de pacientes en línea, hagan cambios en las prácticas de prescripción e implementen otras estrategias para garantizar que los sistemas de salud pública no abandonen a quienes más los necesitan.
“Solo el 14% de los países informó haber eliminado las tarifas de usuario, lo que la OMS recomienda para compensar las posibles dificultades financieras de los pacientes”, acotó.
Tedros anunció que la Organización está desarrollando un “centro de aprendizaje de servicios de salud”, una plataforma basada en la web que permitirá a los países compartir experiencias y aprender unos de otros.
La Comisión Europea expresó su interés de unirse a COVAX, la iniciativa mundial de la OMS para promover el desarrollo y el acceso equitativo de las vacunas contra el COVID-19, con una donación de 400 millones de euros.
El anuncio fue hecho este lunes a través de un comunicado, en el que la presidenta de la comisión Ursula von der Leyen aseguró que la colaboración mundial es la única forma de superar la pandemia.
La participación de la UE en COVAX será complementaria a las negociaciones en curso con las empresas de vacunas que tienen como objetivo aumentar la capacidad de fabricación de los productores de vacunas, contribuyendo a los esfuerzos globales.
Los términos y condiciones detallados para la participación y contribución de la Unión a COVAX se elaborarán en los próximos días y semanas.
El doctor Tedros agradeció a la Comisión por su aporte e incorporación a la iniciativa.
“La unidad nacional y la solidaridad mundial son fundamentales. Este virus prospera cuando estamos divididos. Cuando estamos unidos, podemos derrotarlo”, expresó.