En la reunión habitual del ejecutivo para chequear la situación epidemiológica, el mandatario lamentó las indisciplinas de los últimos 12 días en las provincias occidentales de La Habana y Artemisa que marcaron un retroceso en lo logrado en meses anteriores de la pandemia.
Si no volvemos a controlar la situación estamos comprometiendo la vida de las personas, su salud, y también el reinicio del curso escolar, para lo que faltan 25 días, subrayó el jefe de Estado.
Reconoció que el venidero período docente será 'retador', porque implicará los contenidos perdidos y comenzará la siguiente etapa lectiva.
Díaz-Canel señaló que, aunque siempre pondrán la salud por encima de todo, la economía se resiente ante cada indisciplina debida a la necesidad de colocar recursos en función de la atención médica de los pacientes y de controlar las cuarentenas en los lugares afectados.
Por esa razón, instó a compartir la responsabildiad ciudadana e institucional y llamó a no perder la percepción de riesgo. 'Esta es una batalla por la vida' y 'cada vez que hay una indisciplina aparece un foco', afirmó.
De igual manera, se refirió a la necesidad de mantener el pesquisaje y aislar rápidamente a todos los contactos de los casos confirmados para detener la cadena de transmisión.
Autorizó a las autoridades locales a no dudar si poner en aislamiento una localidad o municipio en aras de controlar la propagación del nuevo coronavirus. 'No es una exageración, es la manera que tenemos de volver a la normaldiad', precisó.