La creación de un nuevo impuesto sobre el valor agregado (IVA) en Brasil, que combinará dos gravámenes federales pagados por compañías, podría generar hasta 373.000 empleos, según estimaciones del Ministerio de Economía.
El nuevo IVA del 12%, que el ministro de Economía Paulo Guedes presentó al Congreso la semana pasada, combinará la contribución al seguro de desempleo 'PIS' y el impuesto a la seguridad social 'Cofins', que pagan actualmente las compañías.
Se trata de la primera parte de la amplia agenda de reforma fiscal del gobierno, que busca simplificar el complejo sistema impositivo del país y reducir, en última instancia, la carga general de los gravámenes.
Según estimaciones del Ministerio de Economía publicadas el jueves, esto podría generar entre 142.000 y 373.000 empleos, e incrementar la productividad general entre un 0,2% y un 0,5%, dependiendo de cuánto caigan los costos de cumplimiento.
También podría impulsar el crecimiento del Producto Interno Bruto per cápita en hasta un 1%, según estimaciones del ministerio.
"La reforma generará ganancias en la eficacia, al tiempo que reducirá la variación de las tasas impositivas efectivas entre sectores", dijo el ministerio.
"Los efectos podrían ser mayores incluso si consideramos las ganancias por la reducción de otras distorsiones económicas que conllevan los impuestos, tales como los efectos en las cadenas de producción", agregó.