El Senado brasileño aprobó destinar 2.700 millones de reales (unos 520 millones de dólares) al gobierno para realizar acciones contra la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19).
Los senadores aprobaron dos medidas provisionales que destinan el dinero a la Presidencia de la República y a los ministerios de Salud, Educación, Justicia, Derechos Humanos y Ciudadanía.
Concretamente se destinarán 54,8 millones de reales (unos 10,5 millones de dólares) a la Presidencia para ser usados en campañas publicitarias, informar a la población e intentar minimizar los impactos de la pandemia.
También se obligará a divulgar informaciones de utilidad pública, a la cobertura y distribución de actos del gobierno federal para luchar contra la COVID-19 y a ampliar los servicios de transmisión por satélite para ofrecer clases a distancia a niños y jóvenes en edad escolar durante el aislamiento.
Entre los ministerios, el de Salud es el que recibirá más dinero (2.049 millones de reales, unos 395 millones de dólares) para la atención especializada a la salud, la seguridad alimentaria y nutricional y para la protección social en el ámbito del Sistema Unico de Asistencia Social.
Al Ministerio de Educación se destinarán 339,4 millones de reales (unos 65,4 millones de dólares) para financiar medidas de control y combate contra la COVID-19 en institutos federales y universidades, así como la producción de alcohol en gel, oxígeno hospitalario y análisis clínicos y de laboratorio.
El Ministerio de Justicia y Seguridad Pública recibirá 199,8 millones de reales (38,5 millones de dólares) a ser utilizados en acciones integradas de los órganos de seguridad pública, de las agencias de vigilancia sanitaria y secretarías de salud de los estados en las fronteras del país.
El dinero también deberá destinarse para atender comunidades indígenas durante la pandemia y para comprar equipamientos para prevenir la expansión del virus en el sistema carcelario.
El Ministerio de la Mujer, de la Familia y de los Derechos Humanos recibirá 45 millones de reales (8,6 millones de dólares) para campañas de prevención destinadas a ancianos, personas con deficiencias, pueblos y comunidades tradicionales y para producir materiales para la promoción de la salud emocional durante el aislamiento social.
También recibirán dinero el Ministerio de la Ciudadanía (50,1 millones de reales o 9,6 millones de dólares) y el de Educación (14,9 millones de reales o 2,8 millones de dólares).
La semana pasada, el Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU) dio 15 días al gobierno para explicar su estrategia de gastos en el combate a la COVID-19 después que una auditoría alertase de la "baja" ejecución de recursos en la lucha contra la pandemia.
La auditoría apuntó que el Ministerio de Salud apenas gastó el 29 por ciento de todo el dinero que recibió para luchar contra la COVID-19.
De los 38.900 millones de reales (unos 7.504 millones de dólares) destinados, sólo 11.400 millones de reales (unos 2.119 millones de dólares) fueron gastados.
Tras recibir la notificación del TCU, el Ministerio de Salud divulgó un comunicado en el que aseguró que gastó 26.400 millones de reales (unos 5.092 millones de dólares) en acciones contra la COVID-19 y que ha realizado transferencias de recursos extras a los estados y municipios.
Brasil es el segundo país del mundo más afectado por la COVID-19, apenas superado por los Estados Unidos, en muertes y casos, con 91.263 fallecidos y 2.610.102 casos, según el último boletín divulgado por el gobierno este jueves.