El número de plataformas petroleras activas, clave para los esfuerzos de exploración, disminuyó drásticamente en gran parte de América Latina desde que se implementaron restricciones destinadas a combatir el coronavirus, según cifras publicadas este viernes por Baker Hughes.
Los precios del petróleo se han visto afectados por la caída de la demanda en medio de la propagación del coronavirus y un aumento en el suministro, que afecta a las compañías de energía de todo el mundo.
Ahora los datos de Baker Hughes, una de las compañías de servicios de campos petroleros más grandes del mundo, muestran una fuerte disminución en las plataformas rotativas activas en países como Colombia y Argentina.
Las plataformas se cuentan semanalmente y se consideran activas si se perfora durante la mayor parte de la semana. Estos resultados se promedian para producir números mensuales de equipos activos.
Baker Hughes registró 25 plataformas de perforación activas en Colombia en marzo. A finales de ese mes, el país sudamericano comenzó un aislamiento preventivo obligatorio nacional aún curso.
En mayo, solo una plataforma estaba activa en el país, según Baker Hughes.
"La prioridad para las empresas en este momento es la producción", dijo en declaraciones a medios el presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo (ACP), Francisco Lloreda, al asegurar que la actividad exploratoria salió del radar.
Los pronósticos iniciales del Gobierno proyectaban que se perforarían 42 pozos de exploración en Colombia en 2020, sin embargo, esto se redujo a un rango de 20 a 33 pozos en abril.
"Para el mediano plazo y el punto de vista de las reservas de Colombia es muy grave que la actividad exploratoria esté prácticamente paralizada", afirmó Lloreda.
En Argentina, que inició una cuarentena el 20 de marzo, las plataformas activas cayeron de 38 ese mes a solo dos en mayo.
En el mismo mes, Argentina estableció un precio local de referencia del petróleo crudo de US$45 por barril para ayudar a proteger a las compañías de energía de la caída de los precios.
Mientras que la mayoría de los países de la región tenían dos o menos plataformas activas en mayo, México y Brasil tenían 42 y 11 plataformas activas, respectivamente.
En abril, el ministro de energía de México dijo a Reuters que el país seguirá adelante con los planes de inversión y producción de petróleo.