El Salvador entró el jueves en una cuarentena "absoluta" y "rígida" para evitar que los casos de COVID-19 colapsen su sistema de salud, anunciaron las autoridades de ese país .
La medida durará hasta el próximo 21 de mayo, cuatro días más de la fecha en la que se esperaba concluyera la cuarentena domiciliar obligatoria.
Suspensión del transporte público
El presidente, Nayib Bukele, ordenó por decreto suspender el transporte público durante los 15 días que, en principio, estará vigente la "cuarentena especial".
"Solo se habilitó el transporte para empleados de empresas e instituciones públicas y privadas autorizadas" y de "población vulnerable". Estos traslados se harán de forma gratuita a través de "las rutas habituales del transporte colectivo" entre las 6.00 y las 8.00 y las 16.00 y las 18.00.
Además, se limitan las salidas a la calle hasta el punto de que solo se puede comprar comida o remedios dos veces a la semana en función del último número del DNI.
"Sabemos que esta nueva fase nos obligará a adaptar nuestra rutina y nuestros hábitos de una forma nunca antes vista. Sin embargo, es momento de pensar en colectivo, no de forma individual, de poner la salud por delante y ser responsables con nuestra vida y la de nuestros seres queridos", sostuvo el mandatario.
El primer caso fue detectado en El Salvador el 13 de marzo y desde entonces sumaron 633 contagios y 15 muertos.
Hay actualmente unos 87 pacientes hospitalizados por el coronavirus, 17 de ellos en estado crítico.