De acuerdo con lo previsto, el venidero 8 de marzo representantes de unos 60 países que cooperan con la región caribeña, asistirán a la Primera Conferencia de Cooperación de este mecanismo que tendrá por sede esta capital.
Para el 09 y 10 de marzo se realizará también aquí la vigésimo segunda reunión del Consejo de Ministros de la asociación.
El día 11 tendrá lugar la V Reunión Ministerial CARICOM-Cuba para repasar la marcha de las relaciones integrales entre esta isla y las naciones hermanas asociadas a la Comunidad del Caribe.
La AEC, surgida en julio de 1994, tiene como objetivo fundamental en su tratado constitutivo ser un organismo de consulta y concertación de los países y territorios insulares o con costas en el Mar Caribe.
Este esquema regional experimenta en la actualidad un proceso de revitalización, a lo que la VII Cumbre realizada en junio de 2016 le dio un impulso con el logro de tratos en temas comunes para las 25 naciones miembros y los que figuran como asociados.
El presidente de la Cátedra de Estudios del Caribe Norman Girvan de la Universidad de La Habana, Antonio Romero, destacó que ese grupo definió desde sus orígenes cuatro áreas de trabajo prioritarias, en términos de la búsqueda de esa concertación y cooperación, el comercio, el turismo, transporte y la reducción de riesgo de desastres.
Comentó que al mismo tiempo hay una interrelación dinámica y dialéctica entre esas cuatro áreas de trabajo de la AEC, pues es el turismo un elemento fundamental de la estructura económica de muchas de estas naciones, a su vez es un sector altamente vulnerable al cambio climático y algunas estrategias de desarrollo de ese reglón no son muy consonantes con el medio ambiente.
Por otra parte, el transporte es un gran problema aún por resolver en la zona, tanto marítimo como aéreo, pues es fundamental para impulsar el comercio entre estos países caribeños, es esta una de las grandes limitaciones que históricamente se ha señalado, consideró.
Puntualizó que existe en términos generales un bajo nivel de comercio entre los caribeños, aún cuando hay dinámicas de intercambio bilaterales considerables, y a ellos está asociado entre otros factores las debilidades del transporte en la región.
En el Caribe conviven países como México, Venezuela y Colombia, grandes estados, con microestados como Dominica, Antigua y Barbuda, San Vicente y la Granadinas, lo cual hace que las diferencias se noten en términos de inserción internacional.
Agregó que en este espacio geográfico cohabitan también modalidades de comercio, de socios comerciales, hay diferencias desde la perspectiva de modelos de desarrollo, que tiene ver con esa diversidad ideológica.
La VII Cumbre dejó además aprobado el Plan de Acción de la AEC para los próximos tres años (2016-18), con el objetivo de impulsar el desarrollo sostenible de la región.
En el primero de sus siete puntos fundamentales, el documento expresa el compromiso asumido por sus miembros para establecer y consolidar la llamada Zona de Turismo Sostenible del Caribe.
Para tal objetivo, los firmantes convinieron estimular de manera coordinada las potencialidades en ese sector económico, considerado vital para la mayoría de los países de la región, al definirla como un multidestino turístico por excelencia.
Asimismo, abogaron por elevar las capacidades en el transporte que contribuyan a ampliar el desarrollo del comercio y la inversión económica mediante iniciativas como el programa 'Unir al Caribe por Aire y por Mar'.
Otro de los puntos atiende directamente a la problemática del cambio climático y la mitigación de sus efectos, al abordar la reducción del riesgo de desastres en naciones amenazadas por ese fenómeno.
El plan promete encausar también la cooperación en materia de cultura y educación, con la financiación de proyectos para favorecer los intercambios académicos entre las universidades y otras instituciones regionales.