El Informe ‘Finanzas Verdes Latinoamérica 2017’ recoge datos de más de 100 establecimientos de crédito de la región dice que el 49 % tiene un abanico de productos de crédito, ahorro e inversión (entre otros) que tienen beneficios ambientales.
Del 51% que que aún no los tiene, el 88 % de las firmas dice que están interesados en desarrollar este tipo de oferta. Hasta ahora, el mayor desarrollo se ha dado en soluciones de crédito, principalmente para eficiencia energética y energías renovables. No obstante, al portafolio se han sumado seguros, productos de ahorro e incluso servicios no financieros.
El desarrollo ha sido tan grande, que más de la mitad de las entidades que ofrecen este tipo de servicios ya cuantifica este tipo de cartera por separado.
Tomando como base estos datos, Felaban señala que el crecimiento de estos saldos muestra que hay una demanda importante de estos productos. En el 35% de las entidades, la cartera verde ha crecido más de 50 % en el último año, mientras que en el 54% de los bancos el crecimiento ha estado entre 1 y 50%.
Otro de los hallazgos de la investigación es que la morosidad es prácticamente la misma o menor que la del promedio de la cartera en el 98% de las instituciones financieras.
En cuanto a la rentabilidad, el 78 por ciento de las firmas dijo que es tanta o más que en productos o servicios tradicionales.
Por otra parte, al consultar a las entidades que todavía no han desarrollado su oferta verde, el 21 % dijo que su prioridad son los productos para la agricultura sostenible, y otros mencionaron que buscan dar servicios para mejorar la eficiencia energética e incentivar energías renovables, entre otros.
En el marco de la presentación del estudio, también hubo reconocimientos a las entidades y gremios que lideran la financiación verde.
Justamente, Colombia fue el país que más figuró, pues hubo distinciones para Davivienda (2, más una de El Salvador), Bancolombia y la Asociación Bancaria.