El acuerdo anunciado por el Ministerio de Agricultura y Ganadería de Costa Rica y el Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria de Nicaragua solo habla de evaluaciones a realizar en las plantas de las empresas Dos Pinos y Grupo Lala, pero no menciona fechas en que se llevarán a cabo ni plazos para reanudar el comercio bilateral de leche.
El conflicto inició cuando la autoridad sanitaria nicaragüense restringió el acceso a productos de la costarricense Dos Pinos y otras dos empresas por no haber obtenido la certificación sanitaria para sus plantas industrializadoras.
Posteriormente, luego del supuesto cierre del mercado nicaragüense a los productos lácteos de Costa Rica, las autoridades sanitarias de este país reconocieron que desde mayo de 2016 restringen el ingreso de productos lácteos de Lala, por haber detectado "... varias “no conformidades” con el sistema de producción de las dos plantas inspeccionadas."
Esta situación se sumó al conflicto que ya existe entre los productores lecheros de Nicaragua y el gobierno hondureño, luego de que éste comenzara a restringir el ingreso de leche nicaragüense alegando falta de permisos sanitarios. El problema alcanzó tal magnitud que la nicaragüense Centrolac recurrió contra su vecino país ante la Corte Centroamericana de Justicia en mayo pasado.