MEXICO, (Xinhua) -- El representante para América Latina y el Caribe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Raúl Benítez, abogó por que China y la región latinoamericana trabajen en una doble vía de cooperación sobre la erradicación de la pobreza.
En una entrevista con Xinhua en la Ciudad de México, el funcionario de las Naciones Unidas destacó que el Gobierno de China ha trabajado en políticas que le han permitido sacar a un gran número de personas de la pobreza y el hambre, de la misma manera que lo está haciendo América Latina.
Benítez resaltó el papel de China como un actor en materia de cooperación internacional y aseguró que en América Latina y el Caribe les gustaría poder trabajar en esta materia.
En su opinión, el intercambio de experiencias podría ser en cuestiones de tecnología, mercado, asistencia técnica o capacitación de productoras, entre otros terrenos.
"Creo que el campo que se nos abre es inmenso. Ahora tenemos que ir buscando la forma de poder traducir estas declaraciones en acciones concretas", puntualizó Benítez.
Reconoció que en la región americana y del Caribe uno de los desafíos más importantes es la erradicación del hambre y la pobreza de manera sostenible. Por ello, estos asuntos centrarán la 34ª Conferencia Regional de la FAO para América Latina y el Caribe, que se celebra desde este lunes hasta el próximo 3 de marzo en Ciudad de México y en la que participarán los 33 países miembros.
Para Benítez, América Latina y el Caribe ha sido un ejemplo de políticas públicas para erradicar la pobreza y el hambre. De hecho, enfatizó, "es la región del planeta que más avanzó en esa dirección, cumplió con la meta de Desarrollo del Milenio e, incluso, con la Meta de la Cumbre de Alimentación, la más exigente".
Sin embargo, admitió que quedan muchos desafíos pendientes. Además de alimentar a los 34 millones de personas de la región que aún padecen hambre, se debe apoyar al grupo de personas más pobres. Estos están más concentrados en las zonas rurales, donde residen el doble de desfavorecidos que en las zonas urbanas.
A este sector, añadió, se le debe de dotar de los servicios necesarios, y del acceso al financiamiento, a la tierra y al mercado, para que pueda salir de la pobreza.
Para el funcionario de la FAO, Haití es el país de más alta inseguridad alimentaria mundial.
"De ahí que todos los países de la región tengamos que apoyar a este país hermano", aseveró tras reconocer que la región caribeña vive además una transición difícil por las consecuencias del cambio climático.
"Quizá el mayor desafío de este siglo XXI es convivir con el cambio climático y combatir los efectos negativos y trabajar en las tareas de mitigación necesarias. Hoy por hoy, los actuales sistemas de producción de consumo no son sostenibles ambientalmente, tampoco socialmente (...) y no ayuda al desarrollo de las sociedades", argumentó.
La Conferencia será inaugurada oficialmente hoy 1 de marzo por el presidente de México, Enrique Peña Nieto.