El panel de alto nivel de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre el empoderamiento de las mujeres, que se lleva a acabo en Costa Rica, fue inaugurado hoy con el objetivo de brindar a las latinoamericanas una mayor autonomía económica.
La directora regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe, la brasileña Luiza Carvalho, manifestó en entrevista con Efe que existen muchos obstáculos, como las diferencias salariales, la escasa seguridad social, procesos de selección y legislación discriminatorios, que impide mejorar los resultados económicos de las mujeres.
"Queremos establecer cuáles son los desafíos y soluciones para ver de qué manera podemos presentar recomendaciones para mejorar los resultados económicos de las mujeres en el contexto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y superar esas dificultades y barreras que están impidiendo una plena realización financiera de su vida y una autonomía económica", afirmó Carvalho.
Para las Naciones Unidas, la inversión en el empoderamiento económico de la mujer permitirá alcanzar avance hacia la igualdad de género, la erradicación de la pobreza, y el crecimiento económico inclusivo.
Según ONU Mujeres de 1990 al 2012 hubo un gran progreso en la participación de la mujer latinoamericana y caribeña en el mercado laboral y la región avanzó más que cualquier otra del mundo.
Sin embargo, pese a que todas esas políticas mejoraron las condiciones de vida de las poblaciones, desde el 2013 se ha observado un estancamiento y es necesario generar políticas para proteger lo que se está realizando bien y mejorar en otros ámbitos.
Datos oficiales indican que la principal fuente de ingreso en un 32 % de los hogares de Latinoamérica y el Caribe proviene de una mujer, además la tasa de participación en la fuerza laboral es de un 54 % mujeres y un 80 % hombres.
La brecha de género en el aspecto salarial es de 19 % por el mismo trabajo, mientras que el 59 % de los empleos de las mujeres son informarles, sin legislación laboral ni protección social.
Según la coordinadora de género del Banco de Desarrollo de América Latina, la venezolana, Violeta Domínguez, la mujer es la principal perjudicada en la región en el tema financiero.
"A las mujeres se les debe brindar mayor facilidad a los créditos, empoderarlas económicamente, sin créditos y sin posibilidades financieras eso no va a ser posible. Por eso se deben romper los estereotipos y dar capacitaciones y herramientas para que puedan surgir con sus microempresas", expresó Domínguez.
El foro fue inaugurado por la vicepresidenta costarricense, Ana Helena Chacón, la directora ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka y la presidenta ejecutiva del Instituto Nacional de las Mujeres de Costa Rica (Inamu), Alejandra Mora.
"La desigualdad la hemos vivido las mujeres con una capacidad de silencio extraordinario, pero ahora estas mujeres quieren calzar otros zapatos y no los que el destino premeditado les puso como el zapato de la miseria, del salario desigual, de la violencia de género, esos son lo que tenemos que dejar atrás", manifestó Chacón en su discurso.
El panel de alto nivel fue constituido por el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, en el pasado mes marzo y será presidido por el mandatario de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, y la gerente general de la empresa suiza IKEA, Simona Scarpaleggia, e integrado por líderes de Gobierno, sector privado, academia y sociedad civil de América Latina y el Caribe.