La presidenta de Brasil y Evo Morales se reunieron en el Palacio del Planalto en Brasilia. | Foto: EFE
Publicado 2 febrero 2016 Ambos presidentes se reunieron en Brasil, donde también discutieron la posible entrada de Bolivia al Mecosur.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, y su par de Brasil, Dilma Rousseff se reunieron en Brasilia, donde anunciaron sus planes de cooperar en materia energética, a través del intercambio comercial de gas principalemente.
Durante la rueda de prensa, Rousseff especificó que junto a Bolivia trabajarán por la "importantísima integración energética" con iniciativas relacionadas con el gas natural licuado, gas licuado de petróleo y fertilizantes.
Para ello, los ministros de Gobierno, Carlos Romero; de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez; de Planificación, René Orellana y de Obras Públicas, Milton Claros, viajaron con anticipación para avanzar en las negociaciones en torno a dicha materia.
"La idea es transformar a Bolivia en un centro energético, aprovechando su gran oferta de gas natural", agregó la mandataria brasileña, quien detalló también que se crearán proyectos de inversión en el sector eléctrico, así como en el fomento de nuevas infaestructuras "que impulsen el intercambio entre ambos países".
Habló de las propuestas del tren bioceánico central Atlántico-Pacífico, que contará con una extensión de tres mil 360 kilómetros de vías, de las que más de mil 600 kilómetros ya están construidas en suelo boliviano, que pretende conectar a Brasil, Bolivia y Perú.
Rouseff, expresó el respaldo hacia Bolivia para que ésta forme parte del Mercado Común del Sur (Mercosur).
"En el plano regional, Bolivia cuenta con el apoyo de Brasil para que forme parte del Mercosur", señaló la dignataria brasileña al tiempo que aseguró que se tendrá un diálogo permanente en lo que respecta en la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac).
Asimismo, la presidenta adelantó que ambos países afinan estrategias para estrechar la integración y actuar en la prevención del virus Zika que azota a la región, además de nuevas medidas para mitigar los efectos de la coyuntura económica internacional.
"Vamos a seguir consolidando la justicia de paz, democracia y crecimiento social" manifestó Rousseff al finalizar su discurso.
En ese sentido, el presidente de Bolivia comentó que los países de Latinoamérica, deben continuar luchando por la soberanía de sus pueblos.
Morales reflexionó acerca de las políticas sociales, que deben formar parte importante del desarrollo de las industrias.
Reiteró su intención de colaborar en materia energética con Brasil, puesto que es un país que contribuye con un 30 por ciento de la estabilidad en este sector.
"Necesitamos inversión conjunta que garantice el desarrollo" sostuvo el mandatario boliviano, quien agradeció el apoyo brindado tanto por Rousseff como el exdignatario brasileño, Luis Inácio "Lula" Da Silva.