Quito, 9 de junio de 2015.- La cumbre entre la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y el Caribe (CELAC) se inicia oficialmente mañana en Bruselas. Esta es la segunda reunión de los bloques y la primera con una CELAC institucionalizada. Para Ecuador capta una atención mayor no solo por el acercamiento que se puede obtener, sino porque el jefe de Estado, Rafael Correa, es presidente pro témpore del organismo.
La primera reunión fue en Santiago de Chile, en enero de 2013. En aquella ocasión se propusieron 4 grupos de análisis temáticos, entre ellos el fortalecimiento de la integración birregional de los sistemas de educación superior, que incluye subtemas como los valores universales y la diversidad cultural.
“La cumbre es el principal foro de diálogo y cooperación entre los estados de Europa y de América Latina y el Caribe, por lo cual el interés de la UE para esta reunión es profundizar la relación birregional”, afirmó Peter Schwaiger, encargado de Negocios de la Delegación de la UE para Ecuador.
Pero también hay otros asuntos. Son temas relacionados con el medio ambiente, las drogas, el cambio climático, los derechos humanos, así como otros puntos clave para Ecuador como la educación superior, la cooperación en investigación e innovación y las nuevas tecnologías de información.
Pero aunque existen muchos puntos de convergencia el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, afirmó que hay desacuerdos, el más reciente es por la organización de la cumbre.
La principal desavenencia tiene que ver con la decisión de las autoridades europeas de comenzar la cita presidencial con la presentación de un informe de las reuniones paralelas que mantendrán organizaciones sociales, intelectuales y empresarios de ambos continentes.
“Ahora resulta que en la Cumbre vamos a tener que escuchar primero, y hemos manifestado nuestro desacuerdo, a todas esas organizaciones que no sabemos qué representación tienen”, detalló el canciller. A eso se suma el límite de 3 minutos que tiene cada mandatario para intervenir.
La tesis ecuatoriana es que sean los presidentes los que participen puesto que son los máximos representantes de sus naciones.
Una de las propuestas puntuales de Ecuador es crear un marco jurídico adecuado para solucionar los problemas que enfrentan los migrantes latinoamericanos en el Viejo Continente. “No queremos que sea una reunión para seguir haciendo declaraciones insulsas, sin contenido, o simplemente retóricas”, insistió Patiño.
Por lo pronto el ministro de Relaciones Exteriores está dialogando con la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, para tratar de solucionar las diferencias existentes en la agenda de la cumbre.
Para Ecuador es injustificado que la UE todavía solicite visado de entrada a sus ciudadanos cuando el bloque se dispone a eliminar esa formalidad para los viajeros de otros países latinoamericanos, como es el caso de Perú y Colombia.
Relaciones desde 1999
El acercamiento entre los bloques viene desde 1999 en Brasil, pero la relación cambió radicalmente con la llegada al poder de gobiernos progresistas en Venezuela, Ecuador, Bolivia, Argentina, Brasil y Nicaragua, cuyas políticas lograron reducir la pobreza y la exclusión social, además que modificaron los ejes de sus políticas exteriores, que antes solo se enfocaban en la inversión extranjera.
Schwaiger recalcó que la UE tiene casi 20 años de experiencia en cooperación en América Latina, un periodo en cual la región ha progresado de manera impresionante tanto en términos económicos como sociales. Ahora, en una nueva etapa, se está definiendo una nueva forma de cooperación, más enfocada en programas regionales.
Europa, por su parte, desde 2008 está inmersa en una crisis financiera que disparó el desempleo y afectó el llamado estado de bienestar social. Pero aún así sigue siendo una economía fuerte.
Schwaiger resaltó que de 2002 a 2013 la UE ha dedicado más de 4 billones de euros para acompañar a los países latinoamericanos en distintos programas. La financiación regional tiene un incremento significativo (45%) desde el ciclo anterior. Además de los programas regionales se otorgarán recursos bilaterales a los países, lo que eleva los fondos asignados para América Latina hasta 2020 a $ 2.380 millones.
Importancia económica
Schwaiger acotó que en el ámbito económico, América Latina es de mucha importancia para Europa. “La UE es el mayor inversionista en América Latina, y los países de la CELAC invierten más y más en Europa”, reveló. Pero ese es un puesto que rivaliza con China.
Adicionalmente, la UE es el segundo socio comercial de la región. “Los flujos comerciales se han duplicado en los últimos 10 años, llegando a 200 billones de euros. La UE ha concluido acuerdos comerciales con 26 de los 33 países miembros de la CELAC”, dijo.
Uno de los objetivos puntuales que tendrá la cumbre es la actualización de los acuerdos comerciales que mantiene la UE con Chile y México, que se negociaron hace 20 años. Además, se busca llegar a un entendimiento sobre la construcción de una nueva conexión de fibra óptica para las telecomunicaciones UE-AL y la concreción de un mecanismo de cooperación triangular que permita apoyar a otros países a partir de diferentes experiencias.
Previo a la cumbre se realizó una reunión académica con el fin de ampliar y profundizar el espacio para la educación superior, ciencia, tecnología e innovación. Además de incentivar a las universidades a que fomenten el trabajo en conjunto.