Ciudad de México, 13 de marzo de 2015 (EFE).- El Senado de México ratificó el Tratado de Libre Comercio con Panamá que ambos países firmaron en abril de 2014 y que busca la facilitación del comercio de mercancías y servicios.
El convenio fue aprobado con 67 votos a favor, ninguno en contra y sin abstenciones de los senadores presentes, y fue remitido al Ejecutivo para su promulgación y entrada en vigor, informó a Efe una fuente legislativa.
El Tratado de Libre Comercio México-Panamá busca establecer las bases de la relación comercial bilateral en un marco que permita intensificar los flujos económicos, generar condiciones óptimas para las inversiones y fortalecer la protección de los derechos de la propiedad industrial, precisa el dictamen aprobado.
Menciona que con este instrumento, el país centroamericano cumplirá con el requerimiento de contar con un TLC con todas las naciones que integran la Alianza del Pacífico para poder adquirir el estatus de miembro pleno de esta iniciativa de integración regional formada por México, Colombia, Chile y Perú.
Para la presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores- América Latina y el Caribe del Senado, Mariana Gómez del Campo, este TLC es estratégico "porque permite tener acuerdos comerciales de última generación con todos los países de Centroamérica".
Al presentar el dictamen la legisladora del conservador Partido Acción Nacional (PAN) destacó que Panamá es el centro logístico más importante en América Latina por lo que "este instrumento sentará las bases de un corredor comercial de índole continental".
Asimismo, añadió, "permitirá consolidar la posición de ambas naciones con plataformas privilegiadas de producción y distribución de bienes y servicios en los mercados globales".
Por su parte Gabriela Cuevas, también del PAN, explicó que a partir de la entrada en vigor del Tratado los exportadores mexicanos "resultarán beneficiados porque se espera que en los próximos cinco años los envíos de mercancía mexicana a Panamá crezcan más de doce por ciento anual".
De igual forma, la senadora Lisbeth Hernández, del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), aseguró que este convenio conlleva múltiples beneficios, facilita el comercio, elimina obstáculos técnicos al intercambio y aumenta las oportunidades de inversión y protección de la propiedad intelectual.
Durante su exposición en tribuna y en nombre de la Comisión de Comercio y Fomento Industrial del Senado, Hernández agregó que el instrumento da certeza a los productores mexicanos porque se establecen medidas que impiden la competencia desleal en las áreas contempladas en el texto.
Para Angélica de la Peña Gómez, del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), el TLC permitirá además "la construcción de sinergias en la región latinoamericana y concretar de manera eficiente y efectiva las relaciones económicas con Panamá".
Cifras oficiales señalan que el comercio bilateral se incrementó un 214 % en los últimos 10 años, con lo cual Panamá se ubicó como el cuarto socio comercial de México en Centroamérica y el undécimo en América Latina y el Caribe.
Panamá es el primer inversionista de Centroamérica en México, con un monto superior a 932 millones de dólares, y es el segundo destino de las inversiones mexicanas en la región, con cerca de 2.063 millones de dólares.
De acuerdo con la Secretaría de Economía de México las principales exportaciones e importaciones entre México y Panamá son medicamentos, televisores, barras de hierro o acero, automóviles, toallas sanitarias y pañales, entre otros bienes.