Davos, 22 de enero de 2015 (AFP).- América Latina afronta un año 2015 complicado ante la ralentización de la economía mundial, con un camino dificultoso para Brasil y más positivo para México, afirmó ayer miércoles en Davos (Suiza) el economista en jefe del banco brasileño Itaú Unibanco, Ilan Goldfajn.
"El crecimiento mundial no es bueno. Este año veremos una mejora, gracias a EEUU, pero probablemente no lo suficiente para devolver a Latinoamérica a un crecimiento muy fuerte", aseveró el economista en una conferencia de prensa en el marco del Foro Económico Mundial.
Sus comentarios coinciden con los del Fondo Monetario Internacional (FMI), que este miércoles dijo prever un año de "crecimiento mediocre" en América Latina, para la que recortó su previsión de 2015 al 1,3%.
El economista se mostró optimista sobre México, "que ha hecho su trabajo con las reformas y cuenta con la recuperación de Estados Unidos", que creció un 5% interanual en el tercer trimestre de 2014 y es el destino del 80% de las exportaciones mexicanas.
En el caso de Brasil, Goldfajn valoró positivamente la llegada del nuevo ministro de Hacienda, Joaquim Levy, y consideró que "si todo va bien, y tiene apoyo político, probablemente tendremos una recuperación del crecimiento a partir del año próximo".
Para este año, el economista en jefe de Itaú Unibanco prevé que Brasil crezca un 0,2%, en lo que sería el quinto año de bajo crecimiento.
Este miércoles, el FMI rebajó en 1,1 puntos su previsión de crecimiento para Brasil en 2015, dejándola en apenas 0,3%.
Según Goldfajn, éste es "un año difícil, un año de ajustes, un año de consolidación fiscal".
A principios de año, el ministro Levy anunció una revisión tributaria como parte del programa de ajuste fiscal, con el objetivo de reactivar la mayor economía latinoamericana.
Goldfajn elogió la medida, considerando que "la alternativa de no aumentar los impuestos sería un déficit, y un nuevo déficit (tras el esperado en 2014) significaría un deterioro de las condiciones fiscales y de la calificación crediticia de Brasil".
Respecto a Chile, afectado por la caída del precio del cobre, en su nivel más bajo en más de cinco años, Goldfajn espera una "recuperación, aunque muy lenta".
Sobre Colombia dijo no ser "tan optimista", ya que entre sus principales exportaciones está el petróleo, que desde junio perdió más de un 50% y cotiza ahora a menos de 50 dólares el barril.
El economista pronostica también algunos quebraderos de cabeza para los bancos centrales de la región: la esperada subida de tasas en Estados Unidos, en el caso de México, la inflación, en el caso de Brasil, y el crecimiento en Chile, Perú y Colombia.