Naciones Unidas, 20 de enero de 2015.- Mientras Estados Unidos se fortalece, en México y Centroamérica se espera un avance moderado y Sudamérica padecerá los efectos de los problemas de Brasil. En tanto, el Caribe avanza.
En su informe sobre la situación y perspectivas de la economía mundial para el 2015, Naciones Unidas presenta un panorama de recuperación moderada pero con riesgos significativos para la región de América Latina y el Caribe.
En su estudio, el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU (DESA) considera el impacto de la desaceleración económica de China, la caída mundial de los precios del petróleo y los posibles cambios en la política monetaria de Estados Unidos.
En ese contexto, prevé que el Producto Interno Bruto (PIB) de la región crezca un 2,4%, por encima del 1,3% del 2014, lo cual considera como “un débil resultado” debido a las dificultades internas y disminución de precios en los productos básicos.
Para México y Centroamérica, se estima un crecimiento del 3,5%, mientras que las economías del Caribe crecerían un 3,8%.
En 2015, se proyecta que la economía brasileña crezca un modesto 1,5% y la chilena un 3%, recuperándose de una importante desaceleración el año pasado. Para Venezuela y Argentina los pronósticos ubican el crecimiento por debajo del 1%, e incluso podrían registrar tasas negativas.