Montevideo, 20 de febrero de 2015 (EFE).- España ha sido compañera de viaje de de América Latina en su progreso durante los últimos 25 años y ahora tiene una importante labor que hacer en los países de renta media de esta región, destacó en Montevideo el secretario general de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Gonzalo Robles.

Robles, en una entrevista concedida a Efe con motivo de su visita a los instrumentos de cooperación españoles que operan desde Montevideo con carácter regional, destacó también que el avance de América Latina ha coincidido con el reciente 25 aniversario de la Agencia Española de Cooperación para el Desarrollo que preside.

"Hoy hay una tendencia general de más estabilidad política, más desarrollo democrático, más institucionalización y más desarrollo económico y en ese proceso ha estado España, acompañado durante estos 25 años a América Latina en su crecimiento democrático e institucional, en su fortalecimiento de capacidades y en su desarrollo económico", añadió.

Para el responsable de la cooperación española, "prácticamente no hay sector en el que durante estos años España no haya colaborado", ya que lo ha hecho "en materias como democracia, derechos humanos, procesos de paz, seguridad en Centroamérica, agua y saneamiento, salud y educación".

Por este motivo, Robles considera que "mirando atrás nos podemos sentir satisfechos de haber sido socios y compañeros de viaje en una región que hoy afortunadamente mira al futuro con una perspectiva no exenta de dificultades, pero sin lugar a dudas con un panorama bastante distinto al que era probablemente hace 25 años".

Preguntado por la labor de España en la cooperación "entre iguales" con los países de renta media de la región, especialmente los del Cono Sur, Robles puso de relieve la cooperación en el ámbito técnico, en la transferencia de conocimiento, en la asistencia en diversos campos y en la transferencia de posibilidades humanas.

Todo ello da sentido, a su juicio, a la labor española y por la AECID ha apostado "porque Montevideo sea el centro desde el que se haga una cooperación en ese ámbito con Chile, Argentina, Brasil y Uruguay".

"Se trata de países -dijo- que están saliendo de ciclos largos de consolidación institucional, democrática y también ahora económica, en los que hay que hacer una importante labor de acompañamiento y sobre esta idea vamos a construir un nuevo modelo basado en acuerdos de nueva generación".

Considera Robles que los países "tienen que identificar los ámbitos en los que consideran que la cooperación puede ser más útil, como por ejemplo el fortalecimiento de su administración pública, el turismo o las energías renovables, para a partir de ahí determinar sectores productivos y de la administración que puedan hacer que el salto cualitativo sea importante para un determinado país".

Por ello insistió en el concepto de "cooperación entre iguales", mediante acuerdos de acompañamiento y trabajo conjunto "e incluso de cooperación triangular, de forma que España y Uruguay, por ejemplo, puedan hacer proyectos para terceros países como Haití, o ellos dos con Chile para Centroamérica".

En canto a puntos coincidentes en las prioridades de cooperación en los distintos países de Iberoamérica, Robles señaló el tema del fortalecimiento de la administración, "de tal manera que se consigan políticas públicas más potentes y eficaces que gestionen mejor los recursos y ayuden a que el crecimiento económico se produzca con equidad".

Asimismo, Robles habló en la entrevista de la experiencia española en salud y tratamiento de pacientes crónicos y destacó que "en la medida en la que los países van adquiriendo nivel de desarrollo va envejeciendo su población y en eso España tiene una experiencia que puede aportar, en el ámbito de los servicios sociales, de la tercera edad y de la Seguridad Social, así como en la sostenibilidad de los sistemas sociales de países con una carga de población envejecida cada vez mayor".