Lima, 9 de octubre de 2015.- Los ministros de Economía de las Américas y el Caribe se reunieron ayer para intercambiar ideas en torno a los desafíos que enfrenta la región en medio de un contexto macroeconómico de incertidumbre, y para evaluar las posibilidades de impulsar una mayor integración económica y cooperación a nivel regional.
La reunión se llevó a cabo al inicio de las Reuniones Anuales del Grupo del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional 2015 que, por primera vez desde 1967 —cuando se celebraron en Río de Janeiro—, tendrán lugar en un país latinoamericano entre el 9 y el 11 de octubre.
Los delegados de 21 países se unieron a funcionarios de alto nivel de organizaciones multilaterales, incluido el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), CAF-Banco de Desarrollo de América Latina y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe CEPAL). El BID opera como secretaría técnica, apoyando la preparación y coordinación general de las reuniones. La Séptima Reunión de Ministros de Economía de las Américas y el Caribe fue presidida por el ministro de Economía y Finanzas de Perú, Alonso Segura.
En la conferencia de prensa, el ministro Segura, el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, así como el vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, Jorge Familiar, subrayaron la necesidad de realizar ajustes ahora que los precios de las materias primas han caído y el crecimiento en China se desacelera.
“Discutimos temas importantes para el mejoramiento de la productividad como inversiones en infraestructura a través de asociaciones público-privadas”, dijo Segura. También hizo hincapié en la importancia de actuar en contra de la informalidad laboral, incluida la adopción de medidas relacionadas con el mercado laboral, resaltando el progreso alcanzado por Perú en los últimos años en términos de reducción de la pobreza y la desigualdad, así como el aumento de la clase media. Aunque advirtió que en tiempos más complejos como este es importante focalizarse en la priorización y eficiencia del gasto público para sostener la inversión pública y los programas sociales y así “proteger a los más vulnerables”.
“Sabemos que fortalecer nuestra posición macroeconómica es esencial si queremos retomar la senda del crecimiento. Es por esto que debemos llevar a cabo un ajuste socialmente inteligente, uno que eleve la calidad del gasto público y promueva la inclusión social”, dijo Moreno.
El vicepresidente del Banco Mundial Familiar dijo que “es necesario que los países de la región se adapten al actual escenario económico”, agregando que los ministros reconocían que “esto debe ser hecho de una manera que siente las bases para el crecimiento futuro y que proteja a los más vulnerables”. Los temas debatidos incluyen la consolidación fiscal y el crecimiento a largo plazo, así como temas generales de crecimiento y desarrollo.
Mientras que los países en desarrollo hoy en día contribuyen casi el 40 por ciento del PIB mundial, en 1967 su contribución era de alrededor de un cuarto de esta cifra. Sin embargo, la desaceleración en China y la caída en el precio de las materias primas han tenido un impacto en las perspectivas mundiales. La región de América Latina y el Caribe en particular está atravesando una desaceleración económica que se espera resulte en un crecimiento cercano al cero por ciento este año.
Entre los oradores de la reunión también estuvieron el presidente del Grupo del Banco Mundial, Jim Yong Kim; el primer director adjunto del FMI, David Lipton; y el secretario del Tesoro de EE. UU., Jacob Lew. Asimismo, en la reunión estuvieron presentes el presidente de la CAF, Enrique García, y la secretaria ejecutiva de CEPAL, Alicia Bárcena, junto a otros funcionarios de alto nivel.