La Habana, 15 de diciembre de 2014 (Reuters).- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo a sus aliados de izquierda en Latinoamérica que quería expandir el programa PETROCARIBE, que provee petróleo en términos preferenciales, incluso en momentos en que la baja del crudo agrega presión a la economía venezolana.
Hablando en Cuba en un encuentro de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) de nueve países de América Latina y el Caribe, Maduro no mencionó el impacto de la caída de más un 40 por ciento en los precios del petróleo desde junio.
En cambio, el líder del país miembro de la OPEP habló de expandir PETROCARIBE, incluso en momentos en que el bloque de 18 naciones ha tenido que hacer esfuerzos por mantener las provisiones de crudo.
Los embarques cayeron un 11 por ciento en el 2013 al menor nivel desde el 2007, obligando a los beneficiarios a volcarse a otras fuentes.
"PETROCARIBE, lo que tiene que hacerse, en esta etapa que se abre es consolidarlo, fortalecerlo, ampliarlo, desplegarlo con más fuerza aún", indicó Maduro.
El ex presidente venezolano Hugo Chávez creó PETROCARIBE en el 2005 para ayudar a sus vecinos a lidiar con el alza en los costos de la energía, dejando que financiaran un 60 por ciento de sus compras.
Siete países del ALBA también están en PETROCARIBE.
Sin embargo, la capacidad de Venezuela de actuar como un benefactor de la región ha sufrido junto con su economía, que según analistas está en recesión, con una inflación de más del 60 por ciento y una caída de sus reservas.
Las declaraciones de Maduro reflejaron el tono desafiante pero también optimista del encuentro, en el cual líderes criticaron a Estados Unidos por su embargo económico de 52 años contra Cuba y las sanciones más recientes contra Venezuela.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el miércoles una legislación para imponer sanciones a los funcionarios del Gobierno venezolano que hayan violado los derechos de los manifestantes durante las protestas ocurridas en el país sudamericano a principios de este año.
El encuentro en La Habana marcó el décimo aniversario de la formación del ALBA, una creación de Chávez, quien murió el año pasado, y del retirado líder cubano Fidel Castro.
Maduro, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, el de Bolivia, Evo Morales, y otros líderes de la región asistieron a la cumbre, que fue liderada por el presidente cubano Raúl Castro.