Washington, 16 de enero (EFE).- Según el informe Perspectivas Económicas Mundiales del Banco Mundial, la desaceleración del comercio mundial, las condiciones financieras más difíciles y los mercados de productos básicos menos favorables en 2013, han dejado a muchos países de América Latina y el Caribe luchando con un crecimiento relativamente débil.
La demanda interna se ha moderado notoriamente en Brasil, aunque la actividad está comenzando a recuperarse en México y las exportaciones se están recuperando en América Central, en parte gracias a la ampliación del Canal de Panamá.
Se prevé que el crecimiento regional repuntará de 2,9% en 2014, a 3,1% en 2015, antes de acelerarse a 3,7% en 2016. El fuerte aumento de las exportaciones junto con el incremento estable del consumo deberían impulsar el crecimiento de Brasil a 3,7% en 2016.
Dependiendo de la recuperación de Estados Unidos, se espera que México crezca un 3,4% en 2014, acelerándose a 4,2% en 2016. Los riesgos de deterioro de la situación en la región incluyen un alza descontrolada de las tasas de interés mundial y una disminución brusca, prolongada y profunda de los precios de los productos básicos.
Según la organización internacional con sede en Washington, Estados Unidos, la perspectiva regional es “positiva” y habrá un mayor crecimiento en las exportaciones, pero también habrá dos riesgos particulares.
El primero es si se produce “una desaceleración más aguda de la esperada en China”, lo que podría provocar una caída “más prolongada y grave” en los precios de los bienes primarios. Esto podría afectar, entre otros aspectos, a las exportaciones regionales.
El segundo riesgo está relacionado con el sostenido retiro de la política de flexibilización cuantitativa en Estados Unidos, así como el alza gradual de las tasas de interés. La política es, en esencia, una medida utilizada por la Reserva Federal para revivir el gasto y el crecimiento económico.
El Banco Mundial considera que si bien el mercado ha reaccionado con calma ante el inicio de la reducción, un cambio en esa reacción podría provocar el aumento en las tasas de interés. Esto podría terminar afectando las políticas monetarias y las perspectivas de crecimiento en la región.
El crecimiento por países
El Banco Mundial resalta en su estudio los siguientes desempeños económicos para América Latina:
En Brasil, el crecimiento en las exportaciones y las inversiones públicas para el Mundial y los Juegos Olímpicos ayudará a que tenga un crecimiento “modesto pero sostenido”, que pasará de 2,4% en 2014 a 3,7% en 2016.
Argentina y Paraguay tendrán una “moderación” tras la bonanza en las cosechas de 2013 y crecerán a un promedio de 2,6% y 3,6%, respectivamente.
Se espera que México tenga un crecimiento de 3,4% en 2014, que se acelerará a 4,2% en 2016. El desempeño está ligado al repunte en Estados Unidos.
Las perspectivas para Centroamérica son “positivas”, con una aceleración en el crecimiento de Belice, El Salvador y Honduras.
Se anticipa que las naciones caribeñas crezcan de 3,4% en 2014 a 4,2% en 2016, en especial gracias al turismo.
La economía venezolana tendrá un crecimiento débil a mediano plazo, a medida que persistan la escasez de productos, los cuellos de botella en la oferta y las altas tasas de inflación.
En particular, el Banco Mundial estima que el crecimiento de la región tendrá un “sostenido fortalecimiento” de 2,9% en 2014 a 3,7% en 2016. Las exportaciones también aumentarán en el mismo periodo de 4,0% en 2014 a 5,4% en 2016.
El panorama positivo que resalta el Banco Mundial contrasta con lo que ocurrió en la región en la 2013, pues el crecimiento se vio restringido por la situación poco favorable del comercio internacional y del mercado de los productos básicos.
Además, la demanda interna también fue débil en 2013 y se redujo el aumento del consumo privado y gubernamental.
En sus previsiones más generales, el Banco Mundial proyecta que la economía mundial se fortalecerá en 2014 gracias al repunte de los países en desarrollo y a que las economías de ingresos altos parecen estar superando las dificultades causadas por la crisis financiera internacional.
Según las proyecciones, el crecimiento global pasará de 2,4% en 2013 a 3,2% este año, para luego estabilizarse en los años siguientes.
El presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, explicó en ese sentido que el desempeño de las economías avanzadas está cobrando impulso y que esto, a su vez, debería apoyar el crecimiento de las naciones en desarrollo en los próximos meses.
Éstas últimas pasarán de un crecimiento de 4,8% en 2013 a 5,3% en 2014 y 5,7% en 2016, lo que es inferior al nivel que tenían antes de la crisis. Sin embargo, el Banco Mundial estima que ese ritmo menor no es motivo de preocupación, pues no se debe al potencial de crecimiento de los países.
Por su parte, las naciones de ingresos altos tendrán un crecimiento menor, aunque también en alza. La economía de Estados Unidos se ampliará en 2,8% este año, en comparación con 1,8% en 2013. El crecimiento en la zona euro está previsto en 1,1% tras dos años de contracción.
Y en China, el Banco Mundial espera que sea del 7,7%, un crecimiento “fuerte y sostenido” que ayuda a “consolidar los avances en los países en desarrollo”.